La nueva ambición rubia (platino)

La pelirroja más famosa de Hollywood se ha convertido en una rubia platino más de las muchas que ya se pasean por las alfombras rojas. Tras la estela de los pioneros –Kim Kardashian, Jared Leto, Rita Ora–, hemos visto a Taylor Swift posar en la gala del MET con una imagen mucho más rockera de la que nos tenía acostumbrados la diva del pop. La actriz Kristen Stewart también nos ha sorprendido en el Festival de Cine de Cannes con un aspecto muy diferente al que lucía en la saga vampírica. Y, esta semana, Emma Stone ha dejado atrás su melena anaranjada para convertirse en la nueva rubia de la meca del cine, aunque en este caso todo indica que se debe más a exigencias del guión que a un capricho de la moda, ya que será la próxima en meterse en la piel de Cruella De Vil en una nueva versión de «101 Dálmatas».

De lo que no cabe duda es de que este look es, actualmente, la tendencia capilar que más «likes» consigue en las redes sociales, a pesar de ser un color arriesgado, que no favorece a todas. «El #blondebob les queda muy bien a aquellas con rasgos nórdicos: pieles blancas o muy poco bronceadas, rasgos faciales suaves, ojos claros…», cuenta la peluquera Diana Daureo. «Y si se lleva con un poco de raíz aporta un estilo bastante cool, siempre que no se caiga en la dejadez».

Solo para pelo resistente

Se puede realizar sobre cualquier base, incuso la del negro africano, siempre que tenga una textura capilar muy resistente, porque es uno de los procesos químicos más agresivos. No es recomendable hacerlo en casa, ya que el diagnóstico, y los tiempos de aplicación y exposición del ingrediente decolorante son claves para no achicharrarnos el pelo y el cuero cabelludo, como le sucedió a Miley Cyrus.

La cantante y exestrella de Disney confesó no hace mucho en Instagram que un buen día, aburrida en casa, no se le ocurrió nada mejor que decolorarse ella solita con un kit de uso doméstico, y acabó con un «estropajo» coronándole la cabeza. «Es un tratamiento muy agresivo, hay que darle mucho matiz y brillo para que se vea divino y, sobre todo, necesitamos que el cabello esté cien por cien sano para que el resultado sea saludable», advierte Daureo. Natalie Iglesias, colorista de Maison Eduardo Sánchez, no lo recomienda en absoluto en cabellos finos porque los castiga mucho. «Para conseguir el platino hay que decolorar dos veces, hasta dejar el pelo totalmente sin pigmentos, y este tipo de pelos no suele resistirlo».