Las joyas de la familia Franco se venden por un precio menor del deseado
Con la subasta de Christie’s esperaban alcanzar unos 400.000 euros y solo recaudaron 134.854. La pieza de más valor, un solitario, quedó sin comprador
A las seis y veinte de la tarde de ayer -hora española-, el martillo de madera de Christie’s caía sobre el atril de la sala de subastas de su sede de King Street, en el corazón del Londres aristocrático, para adjudicar la venta de un collar de esmeraldas perteneciente a «una importante familia española» . En Christie’s rige una cláusula de confidencialidad que impide desvelar la identidad de sus clientes, pero era vox populi que se trataba de la familia Franco , desde que se hizo oficial la convocatoria de subasta hace dos semanas. Tras preguntar si había más ofertas en la sala, por teléfono o a través de la web, el collar, número de lote 353, quedó adjudicado por 80.000 libras (93.673 euros), un precio bastante inferior a lo esperado. Se estimaba que podía alcanzar las 120.000 libras (140.511 euros), por lo que no lograron hacer un gran negocio con la venta de la pieza. Data de alrededor de 1925 y está formado por cinco grandes esmeraldas en talla de pera sobre una gargantilla de platino y diamantes.
Cuatro generaciones
La primera vez que vimos esta joya fue el 21 de diciembre de 1959 sobre el cuello de Carmen Polo durante la visita del presidente Dwight Eisenhower a España. Posteriormente fue su hija Carmen Franco quien la rescató del joyero familiar en un día tan señalado como la boda de la Infanta Elena en 1995 en Sevilla y las volvió a lucir durante un acto social. La última mujer de la familia que lo ha llevado ha sido Margarita Vargas , esposa de Luis Alfonso de Borbón , bisnieto de Francisco Franco. Lo sacó a la calle el 26 de octubre de 2016 durante los premios de la revista «Elle», combinado con un vestido de terciopelo.
Además del collar, ayer se subastaron otras dos valiosas piezas del joyero de los Franco. Con el número de lote 352, se vendió un par de pendientes a juego con el collar por 35.000 libras (40.900 euros). Cada uno lleva tres esmeraldas engastadas sobre platino y diamantes y datan de 1930.
El jarro de agua fría llegó con un impresionante solitario con seis diamantes laterales y una gran gema central de 19,24 quilates, la pieza más valiosa y desconocida que los Franco ponían a la venta. Quedó sin comprador , por muchos esfuerzos que hizo el subastador. Salió con un precio de partida de 110.000 libras y Christie’s estimaba que podría llegar hasta los 180.000 libras, pero nadie pujó por ella.
La familia Franco se embolsó ayer 115.000 libras en total (134.854 euros ), un importe inferior a lo esperado. Junto a estos tres lotes, Christie’s subastó otros 350 más, llegados de diferentes casas reales europeas, de princesas francesas, marqueses austriacos, condes alemanes y de varios coleccionistas, dentro de una venta bautizada como «Joyas Importantes».
«Legítimos dueños»
La venta de las joyas de los Franco no ha estado exenta de polémica. La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica redactó un escrito al Ministerio de Exteriores con el fin de que se detuviera la venta de las piezas hasta no conocer el origen y procedencia de las mismas. Se exigió a la casa de subastas que otorgase toda la información sobre las joyas y conocer si han pertenecido al Patrimonio del Estado. La presidenta en España de la casa Christie’s, Pilar González de Gregorio , se mostró ayer contundente con la propiedad de las alhajas unos minutos antes de que se procediera a la venta. «La familia Franco es la legítima propietaria de estas joyas. En Christie’s todo lo que hacemos es legal. No obstante existe un cláusula de confidencialidad que nos impide pronunciarnos sobre los clientes», declaró a ABC vía telefónica.
La alta joyería siempre formó parte del patrimonio de la familia Franco. La misma Carmen Polo era una apasionada de las alhajas, especialmente los collares, que heredó su hija. A punto de cumplirse el segundo aniversario de la muerte de Carmen Franco, la familia sigue repartiéndose la herencia y liquidando propiedades.
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