Fallece en un accidente de tráfico uno de los 14 hijos de Mia Farrow

Thaddeus Wilk Farrow, hijo de la actriz Mia Farrow, murió el miércoles en un accidente de tráfico en Danbury (Connecticut), a media hora de la propiedad de su madre en Bridgewater, en el mismo estado. Farrow tenía 27 años y falleció en el hospital como consecuencia de las heridas de un accidente de carretera en su propio coche. El joven era papapléjico por una polio que sufrió en su infancia.

La policía investiga las circunstancias, pero el miércoles aseguró que no había encontrado «ningún aspecto criminal» en el incidente.

Farrow era uno de los catorce hijos de Mia Farrow, entre biológicos -cuatro- y adoptados -diez-. La actriz lo conoció en un viaje a Calcuta (India) donde Thaddeus vivía en un orfanato con claros signos de maltrato.

El niño había sido abandonado en una estación de tren de la urbe india para pedir dinero, arrastrándose con sus brazos por el suelo. Según un amplio reportaje sobre Mia Farrow y su familia que ‘Vanity Fair’ publicó en 2013, en el orfanato ataban a Thaddeus a un poste y los otros niños le tiraban piedras para hacerle reaccionar con sus impedimentos físicos. La actriz aseguró que en cuanto le vio tuvo una reacción instantánea: «Ese es mi hijo», sintió.

Thaddeus fue el último de los cinco hijos que Farrow adoptó entre 1992 y 1995. Para entonces, la actriz ya tenía nueve hijos: los tres que tuvo con André Previn entre 1970 y 1974, dos hijos vietnamitas adoptados en 1973 y 1976, una hija coreana adoptada en 1978, otros dos hijos adoptados en EE.UU. a comienzos de los 80, y Ronan, el hijo biológico que tuvo durante su relación con Woody Allen, pero que Farrow reconoció -ante un evidente parecido- que podía ser fruto de una relación con Frank Sinatra. Ambos actores estuvieron casados a finales de los años 60 y, aunque se divorciaron a los dos años, «nunca se separaron del todo», como dijo Farrow.

El desembarco de Thaddeus en la familia de EE.UU. no fue fácil, con una casa llena de niños y familiares y con la carrera de Farrow en el cine todavía activa y su labor filantrópica en plena efervescencia. «Da miedo que te metan en un mundo con gente cuyo idioma yo no entendía, con diferentes colores de piel», reconocía Thaddeus en el reportaje de ‘Vanity Fair’. «El hecho de que todo el mundo me quería fue para mí una experiencia nueva, abrumadora al principio».

La muerte de Thaddeus, que era mecánico de coches y estudiaba para ingresar en el cuerpo de policía, es una nueva sacudida a la salud familiar de Mia Farrow, que ha estado inmersa en acusaciones cruzadas los últimos años con sus hijos Dylan y Moses sobre los supuestos abusos sexuales que Woody Allen ejerció sobre la primera y los abusos físicos de Farrow sobre el segundo. Se trata además del tercero de sus hijos adoptados que fallece en su juventud: Tam Farrow murió en el año 2000 a los 19 años por una dolencia del corazón que había arrastrado toda su vida; Lark Previn falleció nueve años después, a los 35, por una enfermedad que no fue revelada.