Imagen de la sevillana Casa de las Dueñas
Imagen de la sevillana Casa de las Dueñas - raúl doblado

La Casa de las Dueñas abrirá sus puertas para las visitas turísticas

Al no ser la residencia habitual del duque de Huéscar, Patrimonio obliga a enseñarlo

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El testamento de Cayetana Fitz-James Stuart, XVIII duquesa de Alba, fallecida en Sevilla el pasado día 20 de noviembre, no se abrirá, como es preceptivo en estos casos, hasta que hayan pasado quince días desde su fallecimiento. La Casa de las Dueñas es para el duque de Huéscar, quien se enfrentará a partir de ahora a una tarea delicada: abrir la residencia de su madre al público para que pueda ser visitada por los ciudadanos que así lo deseen al menos una vez a la semana, tal y como establece la Ley de Patrimonio Histórico de Andalucía.

Al estar catalogado como un Bien de Interés Cultural desde 1932, el edificio debería abrirse al público «al menos cuatro días al mes, en días y horas previamente señalados

, constatando la información de manera accesible y pública a los ciudadanos en un lugar adecuado del Bien de Interés Cultural», según establece la citada ley. Sin embargo, la normativa también recoge que esta obligación de exposición pública podrá ser dispensada «total o parcialmente por la Consejería competente en materia de patrimonio histórico cuando medie causa justificada». Esta circunstancia permitió que en vida de Cayetana Fitz-James Stuart se eximiera a la duquesa de Alba de esta obligación, al considerar que se trataba de su residencia habitual.

No parece que el nuevo propietario convierta este inmueble en su residencia habitual. Por lo tanto, la vivienda podría abrirse a los sevillanos, que dispensaron una cariñosa despedida a la duquesa tras su fallecimiento y que nunca han accedido al interior del edificio.

Se trata de una impresionante construcción, ubicada en pleno corazón de Sevilla y construida entre los siglos XV y XVI, y que esconde los secretos más íntimos de Cayetana. Los expertos consideran que, para abrirlo a las visitas, sería necesaria una reordenación y separar la parte de las habitaciones privadas de la duquesa de la zona más artística y de mayor valor cultural. De esta manera, el catedrático de Historia del Arte Rafael Manzano tiene muy claro que el mayor valor artístico de la casa son, sobre todo, los salones o el espectacular comedor de gala. Por ellos pasaron personajes como el príncipe Rainiero y Grace Kelly.

Pero también son dignas de mención sus pinturas, sus impresionantes alfombras y tapices o sus esculturas. Las habitaciones privadas de Cayetana no tienen el mismo valor artístico de otras dependencias, por lo que es probable que no se abriesen al público. Allí están sus ropas, sus fotografías, sus colecciones de cajas de pastilleros o los muebles que ella consideraba sus «favoritos». Entre esas estancias se encuentra el gabinete donde la duquesa pintaba.

Mucho interés puede tener también la capilla o los patios al estilo andaluz y los amplios jardines que esconden el famoso limonero de Antonio Machado («Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla / y un huerto claro donde madura el limonero»). El poeta nació en una de las dependencias ubicadas en los jardines, ya que su padre trabajaba para la casa de Alba. Una anécdota que aporta aún más valor al inmenso tesoro que los Alba tendrán que mostrar al pueblo que tanto quería a su Duquesa.

Ver los comentarios