Otro colectivo de curas vascos denuncia el castigo al expárroco de Lemona: «Es desmesurado y precipitado»

No le faltan apoyos entre la Iglesia vasca a Mikel Azpeitia , expárroco de Lemona. Diversos colectivos eclesiásticos vinculados al nacionalismo radical, entre ellos la Coordinadora de Sacerdotes de Euskal Herria, rompieron recientemente una lanza en su favor después de que fuera apartado de sus oficios por justificar la actuación de ETA en un documental de Iñaki Arteta. Aunque en un tono diferente, también el Foro de Curas de Bizkaia ha denunciado el castigo que se le ha impuesto a Azpeitia, el cual tilda de «desmesurado» y «precipitado».

El colectivo carga contra la decisión adoptada por la Diócesis de Bilbao, con el obispo Mario Iceta a la cabeza, de apartar de sus funciones al expárroco de Lemona por sus declaraciones en el documental «Bajo el silencio», en el que llegó a decir que la actuación terrorista de ETA «era una respuesta a lo que se estaba sufriendo» en el País Vasco. «Una cosa es decir que estuvo mal y otra admitir que no hubo otra forma de hacer», afirmó.

Aunque acepta que Azpieitia mostró «una empatía desmedida» con los radicales en el documental, el Foro de Curas de Bizkaia no acepta «los juicios de valor emitidos estos días sobre una posible justificación por su parte de la violencia o del terror». «Nunca ha tenido problema alguno en condenar la violencia y el terror como vías de solución para un problema que, además de moral, lo es de convivencia política», asevera en un comunicado aprobado «casi por unanimidad» .

La asociación afirma que el castigo a Azpeitia «obedece más al dictado de la presión mediática que a una información ajustada a los hechos», y denuncia que al expárroco de Lemona «se les leyó telefónicamente la primera nota del Consejo Episcopal previo al envío de la misma a la prensa a pesar de que en ella se decía que estaban “ abordando esta cuestión con dicho presbítero” ».

« Lamentamos su desinformación, su precipitación , así como la desmesura de la decisión adoptada y su falta de coraje evangélico, esperando que sea restituido en su servicio cuanto antes», sentencia la asociación.