El PP denuncia el «sectarismo navideño» de Colau

Navidades cargadas de polémica. Sea por el belén municipal, la iluminación navideña o por la cabalgata de Reyes Magos, las primeras fiestas navideñas de Ada Colau en el Ayuntamiento de Barcelona han tenido tensiones del primer al último día. La nueva líder de Barcelona ha empañado algunos de los actos más tradicionales con un toque sectario.

El presidente del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández, quiso valorar ayer los actos recién acabados y lamentó que la alcaldesa ha intentado «adoctrinar desde las instituciones, incluso a los más pequeños, aprovechando actividades navideñas y la cabalgata de Reyes».

Fernández recordó en una comparecencia a los medios que la fecha del encendido de la iluminación decorativa y el pesebre -que «no ha estado a la altura de Barcelona»- ya marcaron desde un inicio las fiestas.

Además, hizo hincapié en la inexistencia de la pista de hielo en plaza Cataluña, que era una de las principales atracciones de la ciudad en estos días.

En la misma línea, el concejal del PP habló de la Feria de Navidad que se instaló en plaza Cataluña -que costó 810.000 euros- y destacó que en este espacio triunfaron las actividades tradicionales, como la llegada de los pajes reales. Por el contrario, comentó que «fracasó la Feria de Consumo Responsable», en la que se vendían camisetas contra los turistas.

El líder popular también mencionó el concierto que se celebró en plaza Cataluña el pasado 31 de diciembre y en el hecho de que el repertorio incluyera la canción «Sarri, sarri», cuya letra «exalta la fuga de un preso etarra», denunció Fernández.

El presidente popular también incidió en que en la cabalgata de Sarrià el Rey Melchor, «con un gran parecido con el consejero de Barcelona en Comú, Jaume Llansó», pronunció la frase: «Nosotros sí que traemos regalos para todos, no como los borbones, que quieren quedárselos todo ellos».

Petición de cese en Sarrià

Fernández lamentó este comentario, que provocó quejas y silbidos de los adultos asistentes a la cabalgata. Por ese motivo, el edil popular ha solicitado a Colau que «cese a este consejero si él mismo no renuncia a su cargo».

El líder popular denunció que «el gobierno municipal no respeta ni los símbolos ni las tradiciones» y reclamando a Colau «altura institucional, poniendo Barcelona por encima de su sectarismo actual y por encima de las siglas de su propio partido».