Sánchez anuncia «más inversión» para la región que en «el último año de Rajoy»
Asegura que Tudanca será «un gran presidente de la Junta» porque es «valiente y tiene principios»
El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE Pedro Sánchez, aseguró ayer que Luis Tudanca, a quien presentó ayer en Burgos como candidato a presidir la Junta de Castilla y León es «un hombre de principios y valiente». En un acto con un millar de personas y cientos más que no pudieron acceder al recinto por falta de espacio, afirmó que desde que conoce a Tudanca siempre ha visto su «compromiso leal con lo que necesita el partido y España». En este sentido, aseguró que es «un hombre de principios, que quiere a su tierra y una persona valiente», remarcó el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE. Por ello, aseguró que «volverá muchas veces a Castilla y León» -cito visitas a Ponferrada, Leon, Palencia y Segovia- y consideró que Tudanca será «un gran presidente» de la Comunidad. También elogió el ejemplo que supone Demetrio Madrid, expresidente de la Junta y presente también en el acto de ayer.
Además, en su intervención Sánchez hizo referencia al proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2019, que el Gobierno registrará este lunes en el Congreso de los Diputados y que, dijo, tratarán mejor a Castilla y León que los del anterior ejecutivo de Mariano Rajoy.
Fue el propio Luis Tudanca el que cerró el acto en medio de guiños a parte de los asistentes y referencias a las últimas críticas que ha recibido del actual alcalde de Burgos, Javier Lacalle, este pasado fin de semana. «Lo que tiene que hacer es enfadarse con Casado, que es el que le ha obligado a volverse a presentar», afirmó.
Tudanca, que dijo que se «dejará la piel» de aquí a mayo para que Castilla y León «vuelva a tener futuro», aseguró que los socialistas defenderán a la Constitución frente a los independentistas y «la ultraderecha» que quiere terminar con las autonomicas «en las que cree el PSOE». Tras elogiar los avances sociales que ha logrado en siete meses el Gobierno socialista, que son «más que los del PP hizo en siete años», insistió en que su partido en Castilla y León será «leal pero reivindicativo» con el Gobierno y aprovechó su intervención para pedir a Pedro Sánchez un «plan de transición» para las cuencas mineras de León, para que los trabajadores no sea «los paganos de la necesaria lucha contra el cambio climático».
También pidió una mejora en la financiación de las entidades locales y «una nueva PAC justa». Además, adelantó que pedirá ayudas para frenar la despoblación, que en Castilla y León es «el principal problema».
En el plano autonómico, insistió en la importancia de implementar políticas para mejorar la educación y fomentar la igualdad, aunque destacó la necesidad de defender la sanidad pública de «los ataques premeditados de la derecha, que también quiere que se haga negocio con la salud de los ciudadanos». En este sentido, llamó la atención sobre los 555 millones que se han gastado desde 2012 en el Hospital de Burgos, que insiste en que debe convertirse en plenamente público, y recordó la reciente renuncia a su puesto de trabajo de tres médicas de Burgos «que no quieren ser cómplices de las políticas sanitarias de la Junta».
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