«El problema del corto no es de falta de calidad, sino de visibilidad»
Jorge Sanz Pulido Presidente de la Coordinadora del Cortometraje
«Es la hora del corto, no podemos seguir postergándolo», proclamó el manifiesto que leyó al tomar el cargo en abril como presidente de la Coordinadora del Cortometraje Español, Jorge Sanz Pulido, también director del Festival Internacional de Cortometrajes de Aguilar de Campoo (FICA) desde su tercera edición. Después de cuatro meses en la directiva, analiza sus primeras semanas en la Coordinadora y la situación actual de este formato en España.
-¿Cómo ha vivido los primeros meses como director y coordinador de la plataforma?
-Con ilusión, estamos inmersos en el proceso de conocer el camino a tomar y con vistas al objetivo de aglutinar a todo el sector del cortometraje. Tengo mucha confianza, estoy rodeado de gente que conoce a fondo el sector y con ello conseguiremos darle más visibilidad de la que tiene ahora.
-¿Necesita el cortometraje entonces más visibilidad?
-El cortometraje español es una referencia mundial, tiene un gran potencial y es una oportunidad que podemos perder. A pesar de la crisis, este formato ha aumentado en importancia y desde 2004 seis cortos han estado nominados al Oscar. Además, este año una producción española ha ganado la Palma de Oro del Festival de Cannes. Es la época del cortometraje.
-Y en la sociedad, ¿considera que el cortometraje está visto por debajo del largometraje?
-Si, la única ventana que tienen los cortos en nuestro país son los festivales, hace falta ponerlos más en valor. El problema del cortometraje no es de falta de calidad, sino de visibilidad. Hablamos de un campo con más de mil trabajos, formado por gente que quiere dar el salto al cine largo. El cien por cien de las personas del mundo del largometraje proceden del de los cortos y si no existiera esta ventana, sería más complicado dar este salto. Por si solo, el corto puede defenderse, pero falta que las administraciones se den cuenta del potencial y lo apoyen.
-Entonces, ¿necesita un mayor apoyo por parte de las instituciones?
-Creo que sí. Aunque las administraciones hacen un esfuerzo, éste debe ser mayor y tienen que creer en el sector. No hacerlo es dar la espalda a algo vital.
-¿Piensa que en Castilla y León el cortometraje tiene un buen futuro?
-El futuro está perfectamente asegurado. En la Comunidad hay unos buenos festivales muy importantes como el de Astorga, Ávila o Aguilar de Campoo, que este año celebra su 30 aniversario y al que el público nunca ha dado la espalda. También el de Ponferrada, el 3DWire de Segovia, la Muestra de cine Internacional de Palencia, la Muestra de Cine Europeo Ciudad de Segovia, el Certamen de Cortometrajes de Soria, el de Medina del Campo o la Seminci, todos pertenecen a la Coordinadora de festivales de cine de Castilla y León. La gente de la Comunidad es muy luchadora por este mundo.
-Para usted, ¿cuál es el encanto de un cortometraje?
-Que engloba todo lo que tiene un largometraje, pero presentado en una menor duración. Ése es el encanto, que el director debe contar una historia, desarrollarla en 15 o 20 minutos. Además, lo que muestra debe encandilar y enganchar al público en poco tiempo. Para mí, eso es muy difícil y ahí reside su belleza.
-Uno de los proyectos más conocidos de la Coordinadora es «El día más corto». ¿Cómo funciona este proyecto?
-El proyecto nace con la intención de dar visibilidad a este mundo. Esta idea ya existía en Francia, donde celebraban una sesión de cortos, pero no sólo en salas de cine, también en bibliotecas o en museos. Este año celebramos la sexta edición el día 21 de diciembre, y supone una oportunidad para hacer una participación social, porque cualquiera puede hacer una proyección en cualquier parte. Así, durante 24 horas, se muestran cortos de manera gratuita y en todo tipo de espacios.
