Siete trucos para combatir la inflación
Planificar correctamente las decisiones de ahorro, consumo e inversión puede ayudar a afrontar esta situación que los expertos no dan por acabada
Tambores de recesión con la subida de tipos de interés y los precios desbocados
Los precios registran una subida histórica y la tasa de inflación se desboca en junio hasta el 10,2%
Opinión de Agustín Pery: «Cuando la maldita inflación se apodera de la cartera»
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la inflación se ha desbocado en el mes de junio repuntando hasta el 10,2% . Un máximo histórico que no se registraba en España desde 1985 y que ha convertido a la inflación en una de las principales preocupaciones de los españoles.
Sin embargo, a pesar de estos registros, los expertos apuntan a que los precios seguirán al alza en los próximos meses en el contexto de la crisis energética que atravesamos y que se encuentra agravada por la invasión rusa a Ucrania .
Estas subidas de precios limitan la capacidad de gasto , pero también hacen que l os ahorros pierdan poder adquisitivo y se erosione su valor, especialmente si se encuentran en cuentas bancarias no remuneradas. En este contexto, no planificar correctamente las decisiones de ahorro , consumo e inversión , puede conllevar problemas económicos a medio y largo plazo. Es por eso que la planificación financiera es clave en estos momentos para tener unas cuentas saneadas.
En este sentido, desde ABC te proponemos algunas fórmulas bastante asumibles para combatir la inflación desde el punto de vista de las finanzas personales y del ahorro:
Invertir más de tus ahorros
Si bien ante una situación de este tipo el primer impulso suele ser ahorrar la mayor cantidad de dinero posibl e , no siempre es la mejor opción en momentos de inestabilidad económica. Las gestorías y asesores suelen aconsejar que se tenga al menos invertido hasta el 15% de la cantidad ahorrada . Sin embargo, para un escenario de inflación de este tipo, esa cifra debe incrementarse con el objetivo de tapar las posibles pérdidas de valor que experimentarán estos ahorros.
En cambio, si decides aumentar la inversión en lugar de ahorrar más, el dinero aumentará su valor. Un buen consejo puede ser invertir en renta variable . De hecho, los valores relacionados con la energía, materias primas y bienes de primera necesidad son los mejor posicionados.
Comprar en grandes cantidades
En épocas de inflación en las que los precios sean más elevados se debe partir de la premisa básica de que comprar algo ahora es más barato que comprarlo más tarde . Ante esta situación, los vendedores se ven obligados en muchas ocasiones a ofrecer grandes descuentos al comprar en grandes cantidades, de forma que pueden conseguir unos altos ingresos que seguramente palien el más que probable descenso de su nivel de ventas.
Y es que si hoy viéramos un artículo en oferta que se pueda guardar durante mucho tiempo (como toallas de papel, conservas, productos de limpieza, etc. ), y se tiene la posibilidad económica, es mejor adquirirlo en grandes cantidades ahora para tener una ventaja importante a largo plazo.
Adelantar las compras
Es cierto que en períodos de inflación los cambios son muy rápidos . Incluso, lo que hoy puede costar una determinada cifra en cualquier sitio mañana quizá haya aumentado hasta 50 céntimos o un euro su valor.
Una opción interesante puede ser adelantar todo lo posible las compras con el objetivo de ahorrar la mayor cantidad de dinero que sea posible. Es decir, si un producto o servicio que consumes habitualmente está encareciéndose cada vez más, es recomendable que aproveches la oportunidad y te anticipes a comprarlo para disfrutarlo durante algún tiempo sin sufrir los cambios de precio.
Negociar subidas de ingresos
La situación actual en la que los precios suben hasta cuatro veces más que los salarios es insostenible. De esto se deriva que la población sufra una clara pérdida de capacidad de compra , por lo que debemos pensar en posibles soluciones. Una de ellas, aunque seguramente no sea la más popular, es buscar un buen argumento para demandar una subida con la que ajustar nuestro salario a la nueva situación inflacionista.
Y es que el salario deber ir ajustado al IPC o, a día de hoy, se estará reduciendo drásticamente nuestra capacidad de compra. Si el jefe denegase este aumento, debemos empezar a pensar en buscar empleo en otras empresas o sectores. De hecho, las compañías suelen ofrecer diferentes beneficios a los trabajadores nuevos , en particular en los sectores donde hay muchos puestos vacantes.
Buscar sustitutivos más baratos
El IPC representa una cesta de productos de consumo, pero no todos se ven afectados por la misma subida al mismo tiempo. Es por eso que debemos comparar los precios de productos sustitutivos de los que normalmente adquirimos (carnes, verduras, productos de limpieza...)
Las tendencias de los productos o servicios que consumimos son muy importantes para ahorrar dinero a largo plazo . El objetivo pasa, por tanto, por buscar lo que sea más barato o asumible para nuestro bolsillo sin olvidar echar un ojo a los gastos superfluos , ya que en épocas de alta inflación debemos reducir los caprichos al máximo.
Controlar las deudas
En este período inflacionista, puede ocurrir que los tipos de interés comiencen a subir . En caso de que además, seamos titulares de un préstamo a tipo variable, es más que probable que los intereses acaben repuntando.
Es probable que, en este supuesto, se trate de un buen momento para pensar en algunas opciones como c ambiar los tipos de interés a fijo o tomar otras alternativas como refinanciar la hipoteca . Es muy importante igualmente racionalizar el uso de las tarjetas de crédito y acelerar su amortización en caso de que se tenga una deuda pendiente en ella.
Reducir el consumo energético
El factor principal que está causando esta inflación son los precios disparados de la energía . Aunque sea difícil vivir sin gasolina, calefacción o electricidad, es verdad que podemos reducir su consumo al tratarse de gastos variables .
Acciones como coger menos el coche, conducir a menos de 120 kilómetros por hora o mantener los neumáticos hinchados a la presión correcta, son ejemplos de gestos que nos pueden ayudar a reducir el gasto en combustible.
Además, siendo eficientes en el gasto energético de la casa , adoptando medidas como utilizar dispositivos de bajo consumo eléctrico o usarlos en tramos horarios más barato s , pueden ser buenas opciones para ahorrar más.
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