Luis María Linde: «Atribuir nuestra baja productividad a la corrupción no tiene sentido»

Luis María Linde, gobernador del Banco de España, ha entrado en la mañana de este martes en el debate político con una frase que él mismo, antes de pronunciarla, ya anticipaba que podía causar revuelo: «Ya sé que corro riesgos al decir esto, pero me da igual: atribuir nuestra baja productividad a temas de corrupción tiene poco sentido», ha manifestado durante su intervención en Sevilla en el Foro de Diálogos Loyola, que organiza la universidad de los jesuitas con el patrocinio de Caixabank.

Linde ha aludido así, un día después del debate entre los cuatro candidatos a la presidencia del Gobierno para las próximas elecciones del 26 de junio, a un asunto que abordaron algunos de los líderes políticos en la intervención televisiva.

Y lo ha dicho en un contexto en el que estaba enumerando los principales desequilibrios de la economía española, entre los que citó la «baja productividad histórica» de España respecto a los paises de nuestro entorno europeo.

«El problema de la corrupción puede ser una de las causa de nuestra baja productividad, pero hay otras más profundas», ha dicho Linde. Entre éstas ha citado los «temas tecnológicos», la organización institucional o el excesivo peso de las pequeñas empresas y de los servicios en nuestra economía.

El gobernador del Banco de España también ha aludido a la importancia de que se mantengan «las expectativas de estabilidad y credibilidad política y económica» frente a los mercados de capitales. «Si falta alguno de estos factores podemos tener un problema», ha afirmado Linde. «Una economía que debe un PIB en términos monetarios, y que depende tanto del mercado de capitales como la española, debe ser muy cuidadosa con sus expectativas», ha añadido.

No obstante, el primer desequilibrio que ha señalado es el desempleo del 20% y el hecho de que la mitad de los parados lleve más de un año sin trabajar. «Eso tiene una consecuencia crucial en las pensiones públicas» ha alertado Linde. «Tenemos en España una conjunción de factor demográfico y desempleo que pone en dificultades el sistema de pensiones. Todo el mundo sabe que es así y que es imposible negarlo. Hay que buscar soluciones», ha instado la máxima autoridad monetaria española.