El hachazo fiscal del Gobierno hundirá un 30% las aportaciones a planes de pensiones individuales

La asociación Inverco critica la política recaudatoria del Ejecutivo con la subida de impuestos

Daniel Caballero

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El hachazo fiscal del Gobierno a los planes de pensiones supondrá un castigo para más de 700.000 partícipes (el 23% del total) de estos vehículos de ahorro. Este es el cálculo que ha transmitido la asociación Inverco, que añade que las aportaciones a los planes individuales se reducirán este año más de un 30% por las medidas puestas en marcha.

El Ejecutivo ha reducido de 8.000 a 2.000 euros el incentivo fiscal a las aportaciones a estos vehículos individuales. Una modificación rechazada de plano por esta institución, pese a que se busque potenciar ahora el ahorro a través de los llamados planes de empleo en las empresas. De hecho, para estos últimos, en 2021, que tendrán un mayor incentivo fiscal, Inverco no espera que aumenten las aportaciones sino que el dato se quede prácticamente plano; en otras palabras, que se castiga el ahorro personal sin que los planes de empresa vayan al alza.

Ángel Martínez-Aldama, presidente de Inverco, ha incidido en que su máxima es la de «estimular el ahorro, con una política fiscal de medio y largo plazo para enfrentar los retos que como sociedad tenemos». En este sentido, ha rechazado que se ponga el foco en la «recaudación fiscal a corto plazo» , como se ha comprobado con las medidas adoptadas. Estas son tanto el golpe a los planes de pensiones individuales como la tasa Tobin, por ejemplo.

«El volumen de activos de los fondos de pensiones podría mantenerse prácticamente sin cambios y sólo ligeramente incrementado en un 0,4% por efecto de la rentabilidad, cerrando el año con un patrimonio de 119.000 millones de euros », reza el informe presentado sobre las perspectivas para 2021. Así las cosas, ese bajón en las aportaciones de más del 30% para los planes individuales, sin crecimiento en los planes de empresa, la asociación vaticina que se 'moverá' a otros vehículos de ahorro, como los fondos de inversión.

Otro de los vehículos que tiene en el punto de mira el Gobierno son las sicavs, sociedades de inversión con una tributación beneficiosa. El Ejecutivo aspira a poner cerco a su operativa ya este año, pero los continuos anuncios del Gobierno para castigar a las sicavs llevan tiempo lastrando su evolución. «Solo las sicavs experimentaron descensos patrimoniales en 2020, alcanzando los 1.847 millones de euros, debido exclusivamente a los reembolsos registrados por esta tipología de IIC», indica el informe de Inverco.

Asimismo, la asociación reseña que «la incertidumbre regulatoria en torno a las sicavs ha generado una reducción de 130 en el número de entidades registradas desde su máximo en 2015». En 2020, el número de accionistas de estos vehículos se redujo en 30.342 , lo que supone un 7,3% menos. La sangría total, sin embargo, se espera que llegue no este ejercicio sino a partir de 2022, una vez que los nuevos criterios para limitar las sicavs entren en pleno funcionamiento una vez se apruebe la norma. Hay pendiente una enmienda del PSOE a la nueva ley para que se dé un plazo de siete meses para disolver una sicav en caso de no cumplir los requisitos que se quieren imponer, como el cerco a la utilización de accionistas de paja ('mariachis') para alcanzar el límite mínimo actual de las sicav, que está en 100 accionistas.

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