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Los carburantes acentúan la caída del IPC hasta el -1,4% en enero

El Gobierno cree que estamos en las «antípodas de la deflación» pese a encadenar siete meses con tasas negativas

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Los precios continuaron su particular carrera descendente en el comienzo del año. La inflación cayó hasta el -1,4% frente al 1%_del cierre de 2014, y acumula ya siete meses en tasas negativas, según el indicador adelantado del IPC hecho público ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

La causa, apunta el INE, y a falta de conocer el desglose de los distintos componentes de la cesta de la compra, que se hará público a mediados de mes, hay que buscarla en la bajada de los precios de los carburantes, gasoil y gasolina.

En cuanto a la tasa mensual, se situó en el -1,7%, también la más baja de los últimos años. Las rebajas de enero siempre provocan caídas de precios en el primer mes del año, pero en esta ocasión el descenso ha sido más acusado al sumarse a la caída de la cotización del petróleo y su impacto en los precios de la energía.

Más poder adquisitivo

Pese a que la inflación está en tasas negativas desde el mes de julio del pasado año, el jefe de la Oficina Económica de Presidencia del Gobierno, Álvaro Nadal, ha asegurado que la economía española se encuentra «en las antípodas de la deflación».

«La deflación es cuando, al bajar los precios, el consumidor, pensando que van a seguir bajando, deja de consumir, pero con un dato récord de comercio minorista en diez años como el de diciembre estamos en el polo opuesto», explicó Nadal en declaraciones a RNE. Afirmó que las variaciones negativas de IPC, aunque infrecuentes en la economía española, tienen una serie de «ventajas», entre ellas la mejora del poder adquisitivo, el descenso del precio de la energía y el mantenimiento durante 17 meses consecutivos de un diferencial favorable a España en competitividad respecto a Alemania, cuando siempre ha sido al revés.

«Que los precios de nuestros productos crezcan menos que los de los alemanes quiere decir que cada vez los consumidores españoles consumirán más productos españoles que alemanes y al revés», ha afirmado.

Ayer conocimos también los datos de inflación en la Eurozona. Según las cifras de la Oficina de Estadísticas europea, Eurostat, los precios también aceleraron sus descensos en el conjunto de países que comparten la moneda única. En concreto, el IPC de la zona euro bajó hasta el -0,6%, frente al -0,2% de diciembre, acumulando dos meses consecutivos en negativo. También en el conjunto de la zona euro es el descenso de los precios del petróleo el que justifica la mayor parte de la caída.

De acuerdo con estos datos, España gana competitividad frente a sus vecinos. El IPC armonizado español se situó en el -1,5% en enero, nueve décimas por debajo del registraro en el conjunto de la Eurozona.

Las tasas negativas de inflación, que benefician fundamentalmente a ahorradores y a trabajadores y pensionistas, que pueden así ver incrementado su poder adquisitivo, suponen una mala noticia para familias, empresas y administraciones con deudas. De ahí que la situación ideal para España, según los analistas, sería que la inflación se situara al menos en el 0%.

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