Fútbol
La huelga de Cerro de Reyes, peligroso precedente para el Extremadura
Los impagos en 2011 obligaron a la plantilla del equipo pacense a convocar un paro y el equipo acabó siendo expulsado de la competición
El Extremadura UD va a la huelga y no jugará en Riazor ante el Deportivo
La plantilla del Extremadura UD , que este viernes ha anunciado oficialmente que deja de entrenarse y que no jugará el próximo domingo en Riazor ante el Deportivo, resucita las huelgas en el fútbol español. Los continuos impagos que vienen sufriendo jugadores, técnicos y empleados del conjunto azulgrana desde hace más de medio año han convertido su día a día en insostenible y finalmente han optado por una medida de fuerza que han intentado evitar hasta el último momento. Sin embargo, Manuel Franganillo, el presidente , no ha conseguido atraer a un inversor dentro del plazo dado por el vestuario y el fútbol se detiene desde hoy en Almendralejo. Este caso recuerda al protagonizado hace una década (2011) por otro conjunto de esta Comunidad Autónoma, el Cerro de Reyes , que terminó con su expulsión de la Liga de Segunda división B, unos de los últimos precedentes.
El Extremadura UD corre a partir de ahora el mismo riesgo que asumió el Cerro de Reyes en 2011. Si el equipo no se presenta en La Coruña, algo muy improbable salvo un cambio radical de última hora, al conjunto de Almendralejo se le dará por perdido el encuentro ante el Deportivo (3-0) y se le restarán tres puntos. En caso de una segunda incomparecencia, el conjunto azulgrana sería expulsado de la Liga y la próxima temporada militaría en la Segunda División RFEF.
El Cerro de Reyes , último precedente de un equipo que se declaró en huelga por reiterados impagos, fue expulsado en febrero de 2011 de la Liga de Segunda B después de certificar ante el Montañeros su segunda incomparecencia en el campeonato. El conjunto extremeño llegó a La Coruña sólo con siete futbolistas juveniles y el encuentro no se disputó. La semana anterior, el cuadro pacense había jugaba contra el Vecindario con siete juveniles, rebasando el cupo permitido por la Federación. Aquel choque, curiosamente, acabó en empate (0-0). Luis Rubiales, ahora presidente de la RFEF, se encontraba entonces al frente del sindicato de futbolistas AFE.
El Cerro Reyes , un club de la barriada de Badajoz del mismo nombre, sufrió diversos bandazos desde el comienzo de aquel curso (2010-11), el segunda consecutivo en el que la entidad pacense militaba en la división de bronce del fútbol español. La marcha de su entonces presidente, Antonio Olivera Cachola, a mitad de temporada no sirvió para enderezar el rumbo de un club que terminó perdiendo la categoría al ser expulsado de la competición por su incomparecencia en dos partidos tras la huelga convocada por su plantilla.
