Cartel de la fiesta del toro enmaromado
Cartel de la fiesta del toro enmaromado - ABC

«Niñonazo», un samuel de 655 kilos, toro enmaromado de Benavente

El alcalde socialista quiere que esta fiesta sea declarada de interés turístico nacional

ZAMORA Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La localidad zamorana de Benavente ya tiene morlaco para su las fiestas del toro enmaromado: «Niñonazo» es su nombre, de la ganadería de Samuel Flores. El alcalde, Luciano Huerga, concedió a la ciudad, en el día grande de las fiestas patronales de la Veguilla, el toro enmaromado de 2016, que correrá por las calles de la localidad en la víspera del Corpus.

La concesión del astado tuvo lugar en un acto tradicional en el que miles de personas se concentraron frente al Ayuntamiento para pedir el toro hasta que el máximo responsable municipal lo concedió desde los balcones de la Casa Consistorial.

Desde allí, el alcalde de Benavente mostró a los vecinos que se concentraron en la Plaza Mayor un cartel con la imagen del que será el toro enmaromado de 2016, un astado de la ganadería Samuel Flores de la finca albaceteña del Palomar Povedilla.

«Niñonazo» es un toro de pelo tostado chorreado en verdugo, nacido en octubre del año 2010, que pesa 655 kilos.

Este toro recorrerá el próximo 25 de mayo el trayecto comprendido entre el toril y el antiguo matadero de Benavente, atado por los cuernos a una maroma y guiado con ella por los corredores que participan en este festejo taurino.

El socialista Luciano Huerga, que este año se estrenó como alcalde en la petición del toro enmaromado, concedió el astado tras hacerse de rogar durante unos minutos y escuchar los gritos de los vecinos con la petición de «¡toro, toro!». Huerga indicó que pretende que la fiesta del toro enmaromado sea declarada de interés turístico nacional.

La petición del toro enmaromado de Benavente remonta su origen a finales del siglo XIX, cuando las dificultades para sufragar con aportaciones voluntarias la compra del toro llevó a un grupo de jóvenes a irrumpir en el salón de plenos del Ayuntamiento para pedir que las arcas municipales se hiciesen cargo del pago del astado, algo a lo que accedió el alcalde.

Ver los comentarios