‘La verdad y su doble’, la poesía y la fotografía sin límites

« ‘La Verdad y su Doble’ es la muestra de un imaginario poético particular a través del tiempo y a través, también, de la fotografía. Un intento de aunar a algunos de los poetas que no solo me han marcado sino que han supuesto un añadido en el ámbito literario de nuestro país. Un conjunto de trayectorias a las que se suma una mirada personal que interpreta la palabra más allá de la palabra». María Alcantarilla, creadora sevillana afincada ahora en Cádiz –ha pasado varios años en la sierra de Huelva– explica así su última obra. Un trabajo doble, en dos formatos, aunque con idéntico propósito. ‘La verdad y su doble’ es un libro (Sonámbulos ediciones) y una exposición, que puede visitarse en el Espacio de Creación Contemporánea de Cádiz (ECCO) como parte de otra mayor ‘Diálogos I’.

Esta muestra permanecerá abierta hasta el 22 de enero de 2016 y recoge obra fotográfica/instalativa así como un audiovisual de Francisco Almengló, la obra fotográfica y poesía de María Alcantarilla y trabajos audiovisuales de Calde Ramírez. Ocupan las salas 7, 8, 9 y 10 del ECCO.

La joven María Alcantarilla (1983) se considera, ante todo, poeta. Licenciada en Periodismo, ha publicado las plaquettes de poesía ‘Qui Scribit’ y ‘7 Naúfragos en Tierra’ (Dip. Huelva), el poemario ‘El Motivo es lo de menos’ (Huebra), el volumen de poesía visual ‘El agua de tu sombra’ (Musa a las 9), galardonado con el I Premio de Poesía Multimedia Poemad y, ‘Ella: invierno’ (Valparaíso). 

Pero como «la poesía se compone de imágenes», su interés artístico ha desarrollado varios tentáculos: el audiovisual, la pintura y la fotografía. De la traslación de la primera, el verso, a la imagen capturada, Alcantarilla ideó ‘La verdad y su doble’. Dos años ha tardado en materializar el proyecto. Eligió de la obra completa de medio centenar de autores que han marcado y acompañado su trayectoria vital y profesional una sola poesía. Unos versos que le «representaran». De todas las generaciones y tratando con dificultades de que hubiese más o menos igualdad en el número de plumas masculinas y femeninas, la artista tomó su colección y acometió su recomposición virtual. Imagen y palabra juntas, «la palabra escrita no actúa como una simple cartela», una no se entiende sin las otras. «Me considero poeta y la poesía se considera imágenes», insiste la joven artista, que argumenta que su cabeza «está formada por flashes», por lo que le resulta natural cultivar ambas expresiones. Satisfecha con el resultado, Alcantarilla cuenta que también ha conjugado en la exposición imágenes más directas, con total correspondencia con el verso, con otras más veladas y diluidas. En ambas ocasiones, con un sentido íntimo, con una interpretación personal.

Campos abiertos

Caballero Bonald, Pere Gimferrer, Álvaro García, Ana Gorría, Blanca Andreu, Pablo García Baena, Felipe Benítez Reyes, Aurora Luque o Josefa Parra son algunos autores que han ido fraguando el imaginario poético de Alcantarilla, que reflexiona sobre la consideración de que tanto la fotografía como la poesía son un campo abierto. «Eso supone que no hay límites, pero sí horizonte», subraya, e insiste en que se siente antes literata que fotógrafa y como tal no busca una técnica perfecta en esta última faceta. «Atiendo a la composición, pero no le doy tanta importancia. No aspiro a eso. De hechos mis fotografías tienen grano, como reflejo de que la imperfección forma parte del ser humano», comenta María Alcantarilla.

Le ha cundido esa belleza de la imperfección. Su obra ha sido expuesta en galerías de arte contemporáneo como Colorida Art Gallery (Lisboa), Carolina Rojo (Zaragoza) o Slowtrack (Madrid), dirigida por Marta Moriarty, y ha llevado a cabo colaboraciones gráficas con editoriales y medios de comunicación como ‘El País’, ‘Le Monde Diplomatique’ o ‘El Rapto de Europa’ y con otros narradores españoles como Juan Bonilla.