El cazador que abatió a tiros al lince lo confundió con un zorro

Ayer se conoció que la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha se personará como acusación particular si finalmente la autoridad judicial procede a abrir juicio oral en el caso del lince que fue abatido a tiros en una cacería en una finca de Torre de Juan Abad (Ciudad Real) al ser confundido con un zorro, lo que ha provocado gran conmoción en el ámbito medioambiantal y en el sector cinegético de la región.

Fuentes de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente de Castilla-La Mancha, que dirige María Luisa Soriano, señalaron a ABC que, en el caso de una supuesta sentencia condenatoria, la Junta podría actuar aplicando los preceptos de la Ley de Caza regional en una posible retirada de licencias de caza o cierre de cotos, siempre que se hubieran infringido preceptos de esta norma, aunque, en principio, no parece que sea el caso pues todo parece indicar que la muerte del lince ibérico, una de las razas en mayor peligro de extinción del mundo, se debió a un accidente.

El director general de Montes y Espacios Protegidos de Castilla-La Mancha, Javier Gómez-Elvira, dijo ayer a Efe que la Consejería de Agricultura se personará en la causa, una vez que finalice la investigación puesta en marcha por el Servicio de Protección del Medio Ambiente de la Guardia Civil (Seprona), con quien colaboran los agentes medioambientales de la Junta para intentar aclarar los hechos que provocaron la muerte del lince. El animal murió a causa de un disparo y se trata de uno de los ejemplares liberados dentro del proyecto Life Iberlince para la recuperación del lince ibérico en Castilla-La Mancha. El lince se encontraba en muy buenas condiciones físicas, lo que indica ue su adaptación al territorio elegido había sido buena.

Montes de Toledo

El proyecto de reintroducción de la especie seguirá en los próximos meses y a finales de año se liberarán nuevos ejemplares en los Montes de Toledo, donde ya se ha comprobado que es posible porque los terrenos han pasado el examen de las condiciones que se exige para la liberación y suelta del lince ibérico, según Gómez Elvira.