Los ochos participantes de Famelab
Los ochos participantes de Famelab

«La organización de las hormigas» gana a «las madres locas» en la edición 2016 de Famelab

La sexta edición en España de este concurso de monólogos de divulgación científica en clave cómica ha triunfado en Madrid con la asistencia de 750 personas y la presencia de Doña Letizia

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Es difícil pensar en un científico y no asociarlo a la imagen (equivocada) de una persona seria, aburrida, con bata, rodeado de libros o tubos de ensayo. Pero no es real. Y una de las formas de desterrar este mito no es solo conociéndolos. También está Famelab, el concurso internacional que busca fomentar la divulgación de la ciencia pero de una forma completamente diferente: en clave de monólogos divertidos, cargados de humor y originalidad.

Otro mito es el de la edad. Los científicos no tienen bigote, aunque a veces convenga ignorar que hay muchos jóvenes pidiendo becas, investigando y yéndose fuera de España. Estos chicos, aparte de pasión, demuestran muchísimo talento. Pero no solo en el escenario (a veces dan sorpresas y hasta se ve a algún actor camuflado), sino en su trabajo, ya que la mayor parte de los monólogos son fruto de sus tesis e investigaciones.

En esta cuarta edición de Famelab, organizada por la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), que ha tenido lugar esta noche del jueves en los Cines Callao de Gran Vía, han competido en la final española un total de ocho concursantes: médicos, biólogos, investigadores, psicólogos y hasta profesores de Secunadria de matemáticas se han citado en el corazón de la ciudad ante 750 personas (abierta al público por primera vez) y la presencia de Doña Letizia (habitual en las ediciones de Famelab) para demostrar que la ciencia no solo es fundamental en la sociedad, sino que también es divertida.

El primer premio se lo llevó el monólogo sobre «la importancia de la comunicación y la organización de las hormigas», de la bióloga de 26 años Alba Aguión. «Estoy contentísima y súper emocionada de representar a España y hablando de hormigas», dijo muy eufórica.

El segundo premio fue para Daniel Orts, médico de 24 años por su monologo sobre «la comparativa de las madres con los pacientes de psiquiatría».

El tercer premio fue para el monólogo sobre «el pene de los patos» de la profesora de Matemáticas, Guadalupe Castellano.

Ante un jurado formado por Didac Carmona (ganador de 2012), Mónica López Moyano (física y cofundadora de la Asociación de Comunicadores de Meteorología) y Enrique Pérez Vergara "Flippy" (actor cómico y productor ejecutivo) se presentaron ocho hilarantes monólogos.

Guido Santos Rosales es de Santa Cruz de Tenerife, de 28 años y estudió Biología en la Universidad de La Laguna. Hizo un monólogo sobre las células inmunitarias de nuestro cuerpo. Explicó que las células del sistema inmune nos defienden e hizo una especie de teatralización en la que dichas células de comunican entre sí para dar respuesta a los patógenos. Santos Rosales explicó que para aguantar la “presión” las células del sistema inmunitario se “drogan”. En el campo de la investigación, de hecho, es necesario saber qué "drogas" necesitan para luchar contra el cáncer. Este tema forma parte de sus trabajos y por eso ha elegido tratarlo. "Sabemos poco del sistema inmunitario y me encanta. Además es útil saber de esto para combatir el cáncer", aseguró Guido Santos durante el ensayo.

"Las matemáticas están en todas partes, son esenciales para nuestra vida diaria"

Guadalupe Castellano Pérez, tiene 42 años y estudió Ciencias Matemáticas en la Universidad Autónoma de Madrid. Es profesora de Secundaria de Matemáticas y se diferencia de cualquier docente que puede encontrarse en las aulas. Su obsesión, confiesa, "es que los chicos entiendan que las matemáticas están en todas partes, son esenciales para nuestra vida diaria y por eso siempre les doy ejemplos prácticos". Así, su monólogo se centró en la hélice, presente en todas partes: en los “pelos” de Bisbal o incluso, en la reproducción animal: "Por ejemplo, en el caso del pene de los patosá, que tienen forma de hélice y que están orientados hacia la izquierda y que por dicha forma han “exigido” a la evolución que las “patas” tengan una “tuerca” orientada a la derecha".

"Los pacientes de psiquiatría son como las madres"

Álvaro Viudez González es sevillano de 28 años y estudió Psicología. "Intento explicar cosas que nadie conozca". Viudez aludió a las diferencias salariales entre trabajadores que cobran mucho , poco o incluso nada. Viudez explicó que los seres humanos funcionan de forma económica y social. Ejemplificó a tres grupos a los que se les propuso trabajar (en los dos primeros casos por dinero y por una causa en el segundo, por ejemplo, la ciencia). Los resultados de su ejemplo mostraron que el primer grupo que es el que más ganaba obtuvo los mismos resultados que los últimos que no cobraban nada. “Si se te hablan dinero piensas en consumo, pero si te hablan en clave social también lo haces. De hecho, el último grupo rindió igual que el primero. Eso significa que lucharpor una causa puede tener el mismo resultado que hacerlo por el mejor sueldo”.

Daniel Antoni Orts Gonzálvez es de Elche, tiene 24 años, estudió Medicina y prepara el MIR para Psiquiatría. Habló de los psicóticos que distorsionan la realidad y lo comparó, irreverente, con las madres. "Cuando les decimos que no comerán un plátano porque está negro y ellas lo niegan". También, "si un paciente cree que ha sido enviado por los extraterrestres, jamás lo convencerán de lo contrario: igual que a las madres", zanjó.

"Luchar por una causa puede tener el mismo resultado que el mejor sueldo"

Andrea Campos Candela también es de Elche y tiene 29 años. Estudió Biología y Magisterio de Educación Especial. Habló del tamaño de los peces. Se refirió a cómo la pesca está provocando problemas en la evolución de los peces. Dijo que siempre se opta por los grandes que son los reproductores, impidiendo la evolución y a su vez aludió a que el hecho de que se queden solo los pequeños en el mar también es un problema porque aunque no lo pareza, muchos de ellos son adultos, por lo que pueden reproducirse y dar lugar a nuevos peces cada vez más pequeños. "Me gusta mucho comunicar el tema que estoy investigando de esta forma. Es una forma de que la gente conozca cada vez más", explicó a ABC.

El “efecto Axe” de las hormigas

Marco de Mesa Cáceres nació en Madrid, tiene 31 años y estudió Biología Molecular y Biotecnología en la Universidad de Alcalá. Dedicó su monólogo a desmitificar los beneficios de la homeopatía. Explicó que el principio de la homeopatía es tomar una dosis muy reducida de eso que precisamente nos hace mal. Él puso el ejemplo del arroz que le provoca diarrea. "Si como un grano arroz diluido en un mar no me hará nada", bromeó. A su juicio, lo que se vende, que es tan caro, “es agua con azúcar”. “La ciencia es ciencia y no se somete a proceso democrático y la homeopatía no tiene base científica”, zanjó en su monólogo. Marco lo consideró una forma de hablar de ciencia desde otro punto de vista. "También es responsabilidad nuestra decirle la verdad a la gente", reconoció.

Alba Aguión nació en La Coruña y tiene 26 años. Estudió Biología y habló de las hormigas y de su organización perfecta y sin órdenes comparándolos con los humanos. "Se organizan usando feromonas, es decir, por medio del olfato. El “efecto Axe” de las hormigas", explicó. Aguión señaló que lo que hacen las hormigas se llama "inteligencia de enjambre, es decir, elementos sencillos que se organizan dando lugar a un comportamiento complejo. La inteligencia de enjambre sirve para construir robots o saber cómo funcionan las neuronas del cerebro", ejemplificó.

Aguión confesó que jamás hizo teatro pero que como le gusta escribir, lo de los monólogos le pareció una muy buena idea"

Roberto Rodríguez, de Alicante y de 29 años,hizo un divertido monólogo sobre las tortugas. “En ocasiones veo tortuga”, dice al inicio. Se refirió a un proceso genético que afecta a las tortugas de Murcia y de Almería. Habló de dos conceptos. En primer lugar, el de cuello de botella que se refiere a que si bien hay muchas tortugas van quedando cada vez menos y ellas son las que "perpetúan" las características del resto y luego se refirió al "surfing genético", es decir, la presencia de un gen que marca al resto determinando una serie de características a unas tortugas que no poseerán otras. "Esto es como los de Murcia que hablan más que los de Almería".

Ver los comentarios