Unos niños se refugian en unas instalaciones de chorros de agua en un parque de Córdoba
Unos niños se refugian en unas instalaciones de chorros de agua en un parque de Córdoba - valerio merino

Cómo actúa el calor extremo en nuestro organismo

Las temperaturas extremas causan estrés en el organismo ya que su funcionamiento óptimo es entre los 36 y 37,5º C, por lo que el cuerpo acude a diferentes recursos para expulsar el calor

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La ola de calor recorre Europa elevando el mercurio a cotas muy elevadas, no vistas en países como Reino Unido, Francia o Suiza. En España, estas altas temperaturas nos acompañarán por lo menos hasta el próximo miércoles. En concreto, este martes 37 provincias de 13 comunidades autónomas están en alerta con una especial incidencia en Huesca, Zaragoza, Lleida y Valencia que están en alerta roja por las temperaturas extremas, informa la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

La BBC ha elaborado un compendio en su web para conocer mejor cómo funciona el calor extremo sobre nuestro cuerpo: Las temperaturas extremas causan estrés en el organismo ya que su funcionamiento óptimo es entre los 36 y 37,5º C.

Cuanto más elevado el mercurio, el cuerpo se libera del calor principalmente a través del sudor, aunque la respiración y el incremento en el ritmo cardíaco también pueden expulsarlo.Las personas mayores son muy vulnerables

al calor extremo. Entre más caliente y más húmedo, más sudor se expele, y esto incrementa el riesgo de deshidratación.

En situaciones de calor extremo el organismo comienza a luchar para poder enfriarse, lo cual puede dar lugar a e spasmos musculares, agotamiento y golpes de calor. Un trastorno que requiere atención médica de emergencia, porque puede generar un daño permanente en órganos vitales e incluso la muerte.

Temperatura ideal

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que la temperatura ambiente óptima para el cuerpo humano es entre 18 y 24º C, cuando se mantiene a unos 36°C-37°C. Cualquier nivel más elevado provoca que los riesgos para la salud se incrementen. Si el cuerpo se calienta hasta los 39º C-40º C, el cerebro le dice a los músculos que trabajen menos y comenzamos a sentir fatiga.

Entre los 40º C y los 41º C tiene lugar el agotamiento por calor y, en valores superiores a los 41º C, el cuerpo comienza a dejar de funcionar: comienzan a verse afectados los procesos químicos, las células dentro del cuerpo se deterioran y se incrementa la posibilidad de que fallen múltiples órganos.

A esta altura el cuerpo ya ni siquiera puede transpirar porque se detiene el flujo de la sangre hacia la piel, que se siente fría y húmeda, se explica en la web de la BBC.Estos riesgos están vinculados a la temperatura a la cual está acostumbrado el cuerpo. De ahí, que los habitantes de los países más cálidos se enfrentan mejor al incremento de temperaturas.

Los estudios han demostrado que cuando la temperatura ambiente llega a 35º C, y está acompañada de altos niveles de humedad, puede poner en riesgo a la salud. Si alcanza los 40º C puede ser peligroso incluso con niveles bajos de humedad.

Recomendaciones

Al final, todo depende del grado de vulnerabilidad. Por ejemplo, los ancianos, bebés, niños pequeños y mujeres embarazadas son los más susceptibles al calor extremo. También las personas con enfermedades crónicas como problemas cardíacos o respiratorios. Incluso ciertos tipos de medicamentos pueden influir en cómo nos afecta el calor o si padecemos determinadas infecciones.

Otras preocupaciones a adoptar son las de beber mucha agua, darse una ducha tibia y no helada, evitar el ejercicio intenso, abanicarse el rostro más que otras partes del cuerpo y vestirse adecuadamente con ropas ligeras y claras. Pero con un calor extremo es esencial buscar un ambiente frío en el cual se pueda reducir artificialmente la temperatura corporal.