La empresa que gestiona el geriátrico de Benalup acusa a la alcaldesa de prevaricar

La empresa Aura San Miguel Sanlúcar, adjudicataria del contrato de gestión integral de la atención especializada a mayores de la Residencia de Mayores de Benalup-Casas Viejas (Cádiz), ha presentado una querella contra la alcaldesa de la localidad, Amalia Romero (PSOE), por un presunto delito de prevaricación. Consideran que ha participado en la supuesta cesión irregular de la titularidad de la acreditación del centro al propio Ayuntamiento y de la gestión de la atención a la empresa Aura Benalup, también demandada, que «ni siquiera había culminado en ese momento su proceso de constitución».

Según la querella presentada ante el Juzgado de Instrucción en funciones de guarda de Chiclana, a la que ha tenido acceso Europa Press, la empresa Aura San Miguel Sanlúcar y su titular, R. B. P, dirigen las acciones legales por presuntos delitos de falsedad documental, prevaricación, apropiación indebida y delitos societarios contra Aura Benalup; el titular de la misma y exsocio suyo en Aura San Miguel Sanlúcar, J. O. L.; la alcaldesa benalupense y la secretaria interventora de dicho Ayuntamiento.

La exposición de los hechos recoge que Aura San Miguel Sanlúcar se constituyó en 2006 especializándose en atención a dependientes, habiendo transferido su exsocio el 15 de noviembre de 2013 todas sus participaciones a R. B. P. Siendo ambos aún administradores de Aura San Miguel Sanlúcar, tramitaron gestiones con el Ayuntamiento de Benalup para la adjudicación en procedimiento abierto del contrato de gestión integral de la atención especializada a mayores en la Residencia de Benalup.

Tras otorgársele la adjudicación, se inscribió el 8 de febrero de 2013 en el Registro de Entidades de Servicios y Centros de Servicios Sociales de la Secretaría General de Calidad e Innovación, comenzando los administradores de la empresa a tramitar las autorizaciones y certificaciones oportunas en cumplimiento con lo establecido en el pliego de condiciones. Sin embargo, el querellante tuvo conocimiento de que el 7 de noviembre de 2013 -días antes de que su exsocio cediera sus participaciones-, hubo una reunión con el Ayuntamiento en la que se acordó transferir la titularidad de la acreditación de la residencia al Consistorio y la cesión de los derechos que pertenecían a Aura San Miguel Sanlúcar para la gestión integral de los mayores a la mercantil Aura Benalup. Destaca que esta empresa se encontraba en ese momento en proceso de constitución y, por tanto, no tenía plena capacidad jurídica hasta el 27 de noviembre. De esta manera, «no cumplía los requisitos para ser concesionaria o adjudicataria del contrato».

Documentos falseados

Además, el querellante niega haber asistido a dicha reunión, de la que afirma que no tenía constancia, asegurando igualmente que se falsificó su firma en los documentos que resultaron de la misma. Para certificar este extremo, adjunta un informe de un perito caligráfico que estima que las firmas pudieron falsificarse por asimilación de trazo y calco por retroiluminación.

El Ayuntamiento de Benalup rechazó ayer que se hubiera producido algún tipo de irregularidad en la acción municipal. El portavoz del equipo de Gobierno, Francisco González Cabaña, aseguró que el Consistorio tiene presentada una denuncia contra el titular de Aura San Miguel Sanlúcar por «allanamiento con fuerza de un edificio de titularidad municipal y sustracción de enseres y documentos del mismo».

Explica González Cabaña que el Ayuntamiento hizo la concesión de la titularidad del geriátrico y de la gestión de la atención a mayores que «todavía es provisional», puesto que, entre otras cuestiones, todavía falta la firma del contrato. Detalla que se adjudicó a la única empresa que concurrió, Aura San Miguel Sanlúcar, realizando desde entonces el Ayuntamiento los trámites para el concierto de plazas con la Junta. Sin embargo, indica que hay un momento en que la sociedad adjudicataria se divide, los socios se separan y acuerdan que es Aura Benalup la que se queda con el geriátrico, siendo esto una cuestión «interna» de la empresa y un «problema entre socios» que el Consistorio desconoce, puesto que la firma del demandante «aparece en todos los documentos» para la tramitación correspondiente. No obstante, apunta el portavoz municipal que el pasado Miércoles Santo la Policía Local les informó de que una persona -el querellante- había entrado en el geriátrico, que insiste en que «todavía es de titularidad municipal y la autorización de la Junta está a nombre del Ayuntamiento», episodio que fue denunciado.