Un pacto más longevo en la Isla

Estabilidad para la ciudad. Fue el motivo que tanto populares como andalucistas dieron para justificar en junio de 2011 la renovación de un pacto que se había roto escasamente un año antes. Aunque las siglas eran las mismas, los protagonistas eran otros. José Loaiza, por parte del PP, y Franciscos Romero, por parte del PA, siguieron los pasos que anteriormente dieron Carmen Pedemonte y Manuel María de Bernardo respectivamente, para formar de nuevo equipo de Gobierno.

Eso sí, su acuerdo es más longevo, ya que ha superado al que se realizó en el año 2007. Fue el 7 de mayo de 2010, justo en medio de la celebración de los fastos del Bicentenario, cuando el entonces alcalde, Manuel María de Bernardo, anunciaba la ruptura del pacto, que el PP basó en la desconfianza y la perdida de credibilidad sufrida por los andalucistas ante el robo de 7,8 millones de euros de la caja municipal.

Y aunque De Bernardo era el candidato a la Alcaldía, tras al fiasco de las elecciones decidió dar un paso atrás en favor de Francisco Romero, propiciando que los populares se replantearan la posibilidad de redimir ese pacto con el objetivo de lograr una estabilidad que de otra forma sería imposible, al tener solamente un concejal más que los socialistas. Además, tanto PA como PSOE descartaron la opción de unirse en las elecciones, como consecuencia del robo precisamente. Una coalición de izquierdas era imposible, porque Izquierda Unida entraba con un concejal sólo, y Ciudadanos, que consiguió dos, repudiaba los pactos, entre otras consignas, para insuflar aire nuevo a la política.

Sin fecha

Aunque hay que destacar que han sido varias las ocasiones en las que han cogido fuerza los rumores con respecto a la ruptura del pacto, lo cierto es que el acuerdo continúa vigente y ni uno ni otro partido tienen por el momento la intención de disolverlo o hacer más cambios en su organigrama. No hay fecha y aunque parece poco probable que lleguen de la mano a las elecciones, todo indica que se alargará en el tiempo y se exprimirá mucho más allá que el anterior.

Y eso que a pesar de durar más tiempo sus relaciones están más desgastadas que en el pacto de 2007. Se han producido más roces y choques de opiniones y la prueba es que resulta complicado que el líder popular y el andalucista se sienten a dar una rueda de prensa conjunta. Siempre dan su versión por separado de los temas importantes de la ciudad, incluso de aquellos que dependen de la gestión municipal. Es el caso de la decisión de rescindir el contrato más importante de la localidad, el de la basura, anunciado por Francisco Romero sin estar presente el alcalde, José Loaiza, o de todo lo que tiene que ver con el 'Espacio Camarón', pues en esta caso es Romero el que no está en las fotos a pesar de ser el encargado de Cultura.

Una serie de factores que no han impedido que tanto uno como otro hayan sabido ponerse de acuerdo finalmente y no escenificar en los Plenos estas discusiones internas, cumpliendo por tanto lo anunciado a la hora de realizar el pacto, mantener la estabilidad de la ciudad. Sobre todo por lo complicado que sería ahora gobernar en minoría por parte del Partido Popular, ante la severa oposición del PSOE, y perder la posibilidad de vender gestión por parte de los andalucistas, que serían la tercera fuerza del Pleno con sólo tres concejales.

Un pacto más longevo aunque con más sobresaltos que el anterior. Habrá que ver hasta cuándo continúa vigente y por qué tema se rompe en esta ocasión. Hasta el momento ha superado uno de los asuntos más espinosos sin que se haya producido ninguna crisis en el pacto. La denuncia del Ayuntamiento sobre el desfalco ante el Tribunal de Cuentas señalando a De Bernardo, que formaba parte del equipo de Gobierno, y su salida tras la sentencia que confirmaba su responsabilidad subsidiaria (a la espera de los recursos).