Espíritu crítico

Aveces, últimamente la mayoría, nos excedemos en el desarrollo de nuestro espíritu crítico. Nada parece adecuado, correcto o bueno, mucho menos ideal, oportuno o excelente. Esa actitud ha pasado de ser fruto del descontento y el afán de superación ante determinadas cuestiones, a un dogma frente a todos los asuntos por el que más o menos nos sentimos concernidos. Hay que repartir leña, haya o no argumentos. Lo hemos percibido especialmente con la programación cultural organizada para el año grande de Cádiz. Que si es escasa, repetitiva, de poco gusto, trasnochada, cara... No ha habido evento que se haya salvado de la quema. Por rajar se ha hablado este fin de semana de la poca gracia -según lo escuchado durante el desfile- en la marcha de los abanderados de la cabalgata del Carnaval Iberoamericano. La peor parte se la ha llevado el macroconcierto que prepara Canal Fiesta Radio para los actos de la Gran Regata que se celebra esta semana en la capital gaditana y que contará, entre otras, con las actuaciones de Sergio Dalma, Pastora Soler, Manuel Carrasco, Andy & Lucas o Rosa López. No es este el espacio para juzgar la valía artística de estos nombres, pero lo cierto es que, nos gusten más o menos, o siempre sean los mismos, los cantantes citados son de los más valorados en el panorama musical español. Los que llenan teatros e incluso estadios, los que triunfan en las radiofórmulas y mueven masas. En este caso, al menos pensarán muchos, el espectáculo es gratis. Pero seguirán lamentándose por la pésima selección, mientras que en otras ocasiones, cuando se ha empleado un presupuesto vergonzante para montajes de contrastada mala oportunidad y calidad, muchos hicieron mutis por el foro. La memoria es selectiva e interesada, ya se sabe. Que el pataleo es un derecho, también. La desgracia ocurre cuando por tirar por tierra todo, dejamos por los suelos a nuestros propios conciudadanos. Positividad pedía Carlinhos Brown estos días. La oportunidad que se presenta es única. La cultura no es un lujo, impongan o no tasas exorbitantes. La cultura se practica. Está y hay para todos. Busquemos la nuestra y disfrutémosla.