Los retrasos de Alestis para cumplir con Airbus obligan a despidos en la Bahía

Las cuentas de Alestis están en números rojos, pese a contar con uno de los contratos más importantes de Airbus para la construcción del nuevo avión A350. La compañía aeronáutica, impulsada por la Junta y con participación vasca, tiene previsto un plan de ajuste que supondría el recorte de 190 empleos en sus plantas de Sevilla y Cádiz. Los planes de la empresa han soliviantado a los 122 trabajadores de la Bahía que están en el Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) que presentó la empresa el pasado abril.

La cuentas no cuadran y todo apunta a que Alestis acabará el año con un agujero contable de 36,8 millones de euros. Los portavoces sindicales han criticado la gestión llevada a cabo por la actual dirección y han mostrado su rechazo a que «la plantilla pague los platos rotos de decisiones que no han sido acertadas».

Desde CC OO se ha puesto de manifiesto como Alestis no ha sido capaz en la Bahía de poner en marcha al cien por cien su nueva planta de Puerto Real, en la que se han invertido 80 millones de euros. Igualmente, la empresa tiene problemas de ingeniería para desarrollar los programas del A350, que consiste en la construcción del cono de cola del avión y de la 'belly fairing' o panza de este aparato. Este contrato por 20 años supone un movimiento económico de 1.700 millones de euros. Sin embargo, el retraso es manifiesto en la entrega de las primeras piezas a Airbus.

El plan que maneja Alestis para combatir su déficit de tesorería afecta directamente a la plantilla. La compañía quiere reducir también sus gastos de inversión y de masa salarial.

La Bahía está especialmente afectada. Alestis tenía intención de firmar un ERE el pasado abril contra 195 trabajadores, de los 348 exdelphis que contrató para sus instalaciones de Puerto Real. La compañía atravesaba entonces dificultades en la carga de trabajo, sin embargo, la presión social y la mediación de la Junta evitaron el expediente definitivo y se cambió por temporal. Desde entonces se han ido incorporando a la actividad laboral un contingente de 73 trabajadores afectados por esta medida. Quedan en el ERTE unos 122. La medida de la empresa prevé que este paquete de trabajadores, más otros 67 que no están incluidos en el ERTE, salgan de la empresa en mayo, dos meses después de las elecciones autonómicas en Andalucía.

Para el responsable de Industria de CC OO en la provincia, Jesús Serrano, «todo es fruto de una mala gestión». La dirección de la compañía fichó a la vuelta de las vacaciones de verano a un nuevo ejecutivo para ajustar la producción de las plantas de Cádiz y Sevilla a la demanda de encargos. De lo que se trata es de cumplir con el calendario. Esta responsabilidad ha recaído en Juan Calero, un ingeniero con más de 30 años de experiencia en el sector y que viene de Airbus en Illescas (Toledo). Calero ha elaborado un informe sobre costes y viabilidad.

El informe que maneja Alestis sobre el paso de ERTE a ERE reconoce que la aplicación de este plan de ajuste provocará conflictividad social, aunque considera inevitable su puesta en marcha. La compañía no ha ocultado sus problemas financieros, que ha repercutido en el pago de la última nómina. Este plan acaba con las esperanzas de los trabajadores incluidos en el ERTE de volver al tajo en junio, fecha en la que expira el expediente.