Chiclana

El PSOE propone una rebaja del 5% en el coeficiente del IBI

Los socialistas quieren evitar que crezca la presión fiscal como consecuencia de una ponencia de valores «irreal» aprobada en 2007

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El Grupo Municipal Socialista presentó ayer ante el Registro de Entrada del Ayuntamiento una enmienda al Pleno extraordinario sobre el impuesto de bienes inmuebles que se celebrará mañana miércoles. A través de dicha enmienda, los socialistas pedirán a la Corporación municipal la modificación de la ordenanza vigente del IBI, de tal manera que el tipo de gravamen se vea reducido en un 5%, pasando de 0,479 de la actualidad, al 0,472.

Esta reducción haría, según los socialistas en la oposición, que «la presión fiscal no se vea incrementada en Chiclana como consecuencia de la ponencia de valores irreal que existe actualmente». A su juicio, esa subida del importe de los recibos se compensaría con la bajada de uno de los dos indicadores que se utilizan para calcular el importe que pagan los chiclaneros.

La edil del PSOE, Cándida Verdier, explicó ayer que esta rebaja del 5% en el tipo impositivo supondría «una posibilidad de solucionar esta cuestión». Dicha enmienda de adición se uniría a la propuesta presentada por el Grupo Socialista el pasado 2 de noviembre, en la que se solicitaba la creación de una comisión técnica que trabaje en coordinación con los técnicos municipales del área económica y de la Oficina del Catastro, para sacar adelante el expediente de revisión de la ponencia de valores.

Asimismo, a juicio del principal partido en la oposición, esta rebaja solucionará el problema que podría surgir a partir del 1 de enero con la anulación del Plan General de Ordenación, ya que muchos suelos cambiarán de calificación y muchos propietarios de inmuebles en suelo rústico deberán pagar un impuesto de contribución como si fueran inmuebles urbanos.

Hay que recordar que los recibos del impuesto del IBI en Chiclana llevan varios años sufriendo un incremento desmesurado. La razón fue la revisión de la ponencia de valores en el año 2007, justo en pleno boom económico y urbanístico en la localidad. Esa ponencia se basa en el valor de mercado del suelo, que en los últimos años ha bajado en picado. Por tanto, el importe que pagan muchos chiclaneros ahora por su vivienda no se corresponde con el precio que tendría su vivienda a la venta.