La Virgen de los Remedios recorre el centro acompañada de miles de fieles

Emotiva como siempre y con expectación. Un año más los chiclaneros no dudaron en acompañar a la imagen de la Virgen de los Remedios por las calles de la ciudad, en la salida procesional que echó el cierre al programa de festejos elaborados por el Ayuntamiento de forma conjunta con la Hermandad de Nuestra Señora de Los Remedios para conmemorar un año más el día de la Patrona. La última jornada comenzó bien temprano pues a las siete de la mañana se iniciaron los actos conmemorativos, con la celebración del Rosario de la Aurora y una posterior misa cantada.

A las 11.00 horas se produjo la función principal conmemorativa con la actuación de la Agrupación Coral de Nuestra Señora de los Remedios, que fue seguida por la tradicional ofrenda floral ante el mosaico de la Patrona a las puertas de la Iglesia de San Telmo cuando ya pasaba el mediodía.

Finalmente sobre las ocho y media de la tarde desde la misma puerta de San Telmo salí en procesión la Patrona de la ciudad para recibir el calor de los ciudadanos que le ofrecieron piropos y l arroparon a lo largo de todo el recorrido diseñado para la ocasión. Calle La Plaza, Joaquín Santos, Constitución, Álamo, Corredera Baja, La Vega, Alameda del Río y, de nuevo, La Plaza donde se recogió siendo arropada por el canto de un solemne salve. Este fue su intenso itinerario, para crear una fiesta que ha sido vivida un año más con pasión por parte de los chiclaneros que no han dudado en acudir a los diferentes actos que se habían organizado.

Hay que recordar que las fiestas se iniciaron el pasado 30 de agosto y arrancó con el Rosario y el Acto Mariano, al que siguió la Misa Solemne con el tradicional Salve, en la parroquia de la Santísima Trinidad. Uno de los eventos más concurridos fue las gran fileteada popular llevada a cabo el pasado sábado, y la degustación de patatas aliñadas que congregó a doscientas personas en la Calle La Vega. Tampoco se quedó atrás la degustación de carne al toro, organizada por la Hermandad del Cristo del Amor, que contó con la amenización de la noche por parte de la academia de baile de Tamara Oliva.

Aunque uno de los grandes actos fue nuevamente la pisa de la uva que se celebró en la Calle La Plaza y que contó con las actuaciones del pianista José Antonio Núñez Morales y la cantante chiclanera Nazaret Natera.

Un amplio programas que se cerró ayer cuando la patrona volvió a entrar al templo de San Telmo a la espera de volver a reencontrarse con los chiclaneros.