CÁDIZ

La concesionaria del socorrismo cree que hay intereses ocultos tras las protestas

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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Después de semanas de protestas, de críticas y de enfrentamientos políticos a cuenta del estado de los equipos de salvamento de las playas gaditanas y de las condiciones laborales de los socorristas, los responsables de la empresa concesionaria han querido cortar de raíz con todas las acusaciones, que consideran «falsas» y faltas de fundamento.

Raúl Párraga, responsable de la UTE Cade, asegura que el trato que se está dispensando a la empresa «no es justo». La entidad alicantina lleva doce años trabajando en el «socorrismo acuático» y, asegura su portavoz, «nunca hemos vivido ningún conflicto, de hecho estamos considerados como una de las mejores empresas a nivel nacional».

Párraga afirma que lo que cuentan los socorristas en sus protestas son «milongas». Reconoce que se ha tardado algo más de lo previsto en traer los materiales hasta la capital gaditana, algo que está justificado por la tardanza en la adjudicación, que fue realizada a la UTE Cade después de que el concurso quedase desierto. No obstante, se aclara que «se han traído materiales de otros sitios para cubrir todas las necesidades desde el primer momento».

En su afán por dar una cobertura adecuada, la empresa ha puesto a una persona fija en Cádiz que se encarga de la coordinación de todos los trabajos. No obstante, Párraga sospecha que todo el conflicto proviene de una serie de intereses ocultos, «tal vez con la intención de que sea una empresa de la zona la que se haga cargo de la concesión». Desde la UTE se asegura que se está cumpliendo con todo lo que se exigía en el pliego de condiciones y se aclara que «las condiciones laborales de los trabajadores están muy bien». «Se está cumpliendo con todo lo que se pide. En mayo se echaron más horas de la cuenta y se firmó un acuerdo para que los trabajadores estén dados de alta durante algunos días de octubre para que, además de cobrarlas, las coticen», explica el responsable de la empresa, que no entiende las protestas de los trabajadores.

Y entre tanto, sigue la disputa política. El PSOE fue quien envió ayer un comunicado asegurando que los módulos presentan deficiencias y que hay incumplimientos por parte de la adjudicataria.