Arranca la reconstrucción de la plaza de Santa María del Mar sin polémica

Fue objeto de una reacción ciudadana inusual. Constantes y numerosas, las manifestaciones semanales consiguieron, entre 2006 y 2007, que el Ayuntamiento se echara atrás. Los vecinos de la zona, junto a representantes de asociaciones y partidos, se concentraban cada martes para pedir que la plaza de Santa María del Mar quedara libre de un quiosco-bar. Consideraban que la construcción de una terraza, que se concedió al Grupo Grosso de hostelería, suponía «privatizar» un espacio público y crear un muro entre los ciudadanos y la fachada atlántica de la ciudad, que tiene una vista privilegiada desde ese emplazamiento.

Finalmente, el gobierno local cedió, modificó el proyecto y concedió a los manifestantes su primera reivindicación: que el establecimiento hostelero estuviera instalado bajo el suelo, en la pendiente que lleva a la playa, y que dejara la plaza libre para los usuarios.

Hace un año, Grosso anunció que renunciaba al nuevo proyecto. De nuevo salió a concurso pero ya con la premisa de que no habría terraza en la superficie. A Grosso ya no le interesó. Será otra empresa la concesionaria.

Cuatro años después de la polémica, esos miles de palabras y documentos al fin se han convertido en obras. Ayer comenzaron los trabajos de forma oficial. El proyecto definitivo incluye la adecuación de este restaurante, cafetería o bar bajo el nivel del suelo y la reurbanización de la conocida como plaza de la Estrella. Eso incluye juegos infantiles y zonas de esparcimiento que hasta ahora no existían. El acceso a la playa de Santa María del Mar también será completamente renovado

La iniciativa tiene 526.000 euros de presupuesto, incluidos en el Plan Proteja que cuenta con fondos de la Junta de Andalucía para fomentar el empleo a través de oras públicas.

El objetivo del Ayuntamiento es que todo el proyecto esté listo «antes de verano», lo que más allá de las fronteras meteorológicas supone que pretende reinaugurar la plaza (con el nuevo acceso y el local hostelero acondicionado) antes de que comience junio.

Este nuevo proyecto, al fin en marcha, viene a ser un punto medio entre las propuestas municipales y las vecinales. Habrá local de hostelería y recuperación del entorno, pero la plaza quedará despejada como «un espacio público utilizado por vecinos, paseantes, niños, aficionados a visionar las estrellas en las noches de verano o turistas que miran al horizonte», como reclamaban en la web de la plataforma reivindicativa creada hace ya cuatro años.