Fotografía de familia del presidente del PP, Mariano Rajoy, y el presidente PP-A, Javier Arenas, con alcaldes y candidatos a las elecciones municipales, ayer en Sevilla. :: EFE
ESPAÑA

Arenas coloca a los alcaldes andaluces del PP como «avanzadilla de la confianza» para el cambio

Los regidores populares proclaman en un manifiesto que levantarán la voz contra los nacionalismos insolidarios

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El presidente del PP andaluz, Javier Arenas, anfitrión de la convención popular, insistió ayer en el mensaje que lleva repitiendo meses, en que las elecciones municipales serán la antesala de la victoria de su partido en las generales como lo fue en 1995. Aquel año el PP conquistó las alcaldías de casi todas las capitales andaluzas y algunas ciudades medias importantes. Aún hoy el PP gobierna en cinco de las ocho capitales andaluzas y en todas ellas ganó por votos en los pasados comicios. Arenas sabe que este es su principal aval y lo quiere rentabilizar. Y así lo hizo ver en la convención que se celebra en Sevilla, en la que los alcaldes andaluces tienen un protagonismo especial.

El líder del PP andaluz aprovechó el primer acto del cónclave, un encuentro de alcaldes andaluces con la cúpula de su partido, para lanzar el mensaje de que en mayo su partido conquistará «más alcaldías que nunca en Andalucía», lo que allanará el camino de Rajoy a la Moncloa y el suyo propio a la Presidencia de la Junta de Andalucía.

En este acto previo con alcaldes de las poblaciones de más de 40.000 habitantes en un hotel sevillano con vistas a la Torre del Oro, Arenas dijo que los regidores del PP serán la «avanzadilla de la confianza», en alusión al lema del cónclave. También los llamó «embajadores» del cambio. En realidad, el mismo mensaje que horas después diera Aznar al proclamar las elecciones de mayo como un plebiscito para derrocar a los socialistas.

Los regidores del PP dieron a conocer ante Rajoy un manifiesto que fija las ideas proclamadas por Arenas en los últimos tiempos, como son un andalucismo constitucional basado en el reformismo y el centrismo y la petición de más financiación y competencias para los ayuntamientos. El manifiesto, leído por el el candidato de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, se dice que los alcaldes del PP levantarán la voz contra los «nacionalismos insolidarios» que sacan tajada de los gobiernos débiles.

Arenas también reivindicó el simbolismo de Sevilla en las victorias del PP, recordando que en esta ciudad se celebró hace 20 años el cónclave popular del viaje al centro que daría a Aznar su v ictoria en 1996. Con este patrón se midieron luego todas las intervenciones de los dirigentes andaluces en la apertura del congreso. De esta forma, el presidente del PP de Sevilla y alcalde de Tomares, José Luis Sanz, habló de que la reunión de la capital hispalense servirá de «sprint final» para el cambio político en el país. El secretario general del PP-A, Antonio Sanz, que hizo encendidos elogios a Javier Arenas, recordó que aquí, en Sevilla, «empezó la carrera del cambio en el 90».

Los dirigentes andaluces del PP dieron este tinte nostálgico al cónclave, quizás en homenaje a José María Aznar, probablemente el más aplaudido de la reunión. Pero en realidad, el PP andaluz se muestra más que nunca mirando el futuro, convencido de que el cambio «no sólo es posible, sino una realidad», según las palabras de Sanz. Hasta el mismo Rajoy se volvió a manifestar en este sentido: «Andalucía quiere y puede liderar el cambio político», dijo en la reunión y posterior almuerzo con los alcaldes y candidatos del PP. Estos tuvieron un detalle especial con Zoido al sorprenderle con una tarta, ya que ayer era su cumpleaños.