En prisión el ladrón que atracó un taxi con una navaja

Apenas cuenta con 26 años, pero J. A. F. G, el supuesto atracador de un taxista de Cádiz a punta de navaja a comienzos de diciembre, contaba ya con 28 detenciones por delitos de robo con violencia. Esta ficha policial ha sido determinante para que, en su última detención, este joven halla sido enviado a prisión preventiva, bajo los cargos de un nuevo delito de robo.

El robo al taxista tuvo lugar el 28 de noviembre del pasado año, aunque la detención del joven se produjo casi un mes después -el 22 de diciembre-, según informó ayer la Policía Nacional a través de una nota de prensa, en la que se explicaba cómo el joven fue encontrado por los agentes del Grupo II de Delincuencia Urbana de la comisaría en la misma ciudad de Cádiz, en la calle Adolfo de Castro -cerca de la Alameda Apodaca- tras una laboriosa investigación.

El suceso, en cambio, tuvo lugar a muchos kilómetros de allí, en la Barriada de la Paz, donde la víctima recogió confiada al supuesto ladrón de noche alrededor de las 23.00 horas. El joven indicó que se dirigía a la plaza de Puntales, pero a medio camino, a la altura de la calle Sotillo, el 'cliente' -sentado en el asiento delantero- colocó un cuchillo a la altura del costado del taxista y le exigió el dinero de la recaudación. Mientras, «con la otra mano abrió la guantera y buscó el dinero, pero no encontró nada de valor. Frustrado por no hallar el botín, recrudeció presuntamente sus amenazas y presionó con la punta del cuchillo a la víctima, que accedió a entregarle cuanto tenía hasta entonces recaudado: no más de 90 euros, con los que el atracador huyó.

El conductor sufre amenazas

«Se trata de un hecho puntual, aislado, hace siglos que no ocurre algo parecido; tanto tiempo que ni recuerdo cuándo fue el último», explicaba ayer el portavoz de Radio Taxi, José Manuel González, que recordaba que los taxistas gaditanos cuentan desde hace años con protocolos de alerta y seguridad para situaciones parecidas.

Sin embargo, lo más lamentable del suceso no es solo el terrible atraco a mano armada, que afortunadamente no acabó con heridos, sino que el propietario del taxi ha sufrido amenazas y coacciones por parte de familiares del supuesto ladrón desde que se llevó a cabo el arresto, según confirmaron a la voz fuentes del sector.