Drogba y Cristiano, las dos estrellas. :: AP PHOTO
MÁS FÚTBOL

Ronaldo no puede solo

Costa de Marfil frena a la selección lusa de la gran estrella madridista, que destacó con un disparo a la madera

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Costa de Marfil zarandeó a Portugal en el primer cruce entre iguales del Mundial. Había curiosidad por colocar en el microscopio a los integrantes de este grupo concebido para el deleite y las lágrimas. Y el veredicto después de noventa minutos decreta el pulgar hacia arriba para los africanos. Costa de Marfil sometió a Cristiano Ronaldo y su tropa, sin avasallamientos ni nada parecido, pero con la contundencia de su parte. Y si no ganó fue porque Drogba tiene un brazo en cabestrillo y tardó casi setenta minutos en asomar la nariz por el campo. Sin munición para consumar su derroche físico, el partido se le escapó como un azucarillo entre las manos.

Portugal aceptó el gong del descanso con alivio. Un mal síntoma para el equipo de Cristiano Ronaldo. Porque esa fue la presentación de los lusos en el Mundial: un enjambre de futbolistas al servicio de la macro-estrella. Portugal se empleó con poca energía, jugó sin propiedad, en espera de acontecimientos, salvo que el balón cayese en las botas del madridista. Ahí cambiaba entonces la decoración. Lo único fue destacable fue un gran disparo de Cristiano al palo.