IP denuncia ante Cultura el posible derribo del Mercado

El grupo municipal de Independientes Portuenses ha remitido una denuncia ante la delegación provincial de Cultura de la Junta en la que le insta a posicionarse sobre la nueva situación que el mercado de abastos del centro tendrá en el nuevo Plan de Protección del Casco Histórico, que se encuentra en periodo de elaboración. Esta iniciativa se produce tras conocerse que el inmueble queda fuera del catálogo de edificios protegidos y que ya existe un proyecto de utilizar el uso para aparcamientos.

La portavoz del grupo, Silvia Gómez, consideró que esta catalogación protegida debe continuar no sólo en base al valor arquitectónico del edificio en sí, sino también por el valor cultural que como Mercado de Abastos ha protagonizado dentro de la economía portuense desde el siglo XIX. «Estamos ante el punto central y referente del comercio en el casco histórico y sin duda ante la oportunidad de revitalización del mismo como centro comercial abierto». La edil independiente criticó la postura del equipo de Gobierno (PP y PA), les acusó de hipotecar la identidad portuense y dañar un atractivo local. El concejal andalucista Antonio Jesús Ruiz mantuvo, por su parte, una reunión con los treinta vendedores del mercado para explicarles su propuesta de traslado a las Bodegas Cuesta. A juicio de Ruiz, allí dispondrán de mejores dotaciones e infraestructuras y un mayor número de puestos debido a la duplicación de metros. El concejal aclaró a los asistentes que «es una propuesta que se tratará con todos los afectados, comerciantes de la plaza, comerciantes de alrededor y consumidores». E insistió en que no hay prevista demolición: «No queremos el derribo de la actual plaza ya que apostamos por mantener su uso comercial». En cuanto al edificio anexo cuya fachada principal da a la plaza de España, la propuesta que contemplan los andalucistas es la de una galería comercial donde se puedan instalar las grandes marcas.

El andalucista indicó que el futuro aparcamiento de Plaza de Toros tendrá 900 plazas y la peatonalización de la calle Pagador hará posible que los usuarios puedan estar en cinco minutos en el Mercado de Abastos. También apuesta por un minibús en Plaza de la Iglesia que junto a la parada actual de calle San Bartolomé y la parada de taxis complementarán el transporte público.