Un ilustre de la política andaluza que sonó para la candidatura socialista a la Alcaldía de Jerez

Un clásico. Un todoterreno. Un hombre que gana en las distancias cortas. Alguien que no entendió que posicionarse puede acarrear problemas en ocasiones, «y más si lo haces de forma demasiado evidente». Un político al que le tocó lidiar con la res más brava, la de dirigir la Consejería de Empleo de la Junta en el peor momento posible.

Las referencias sobre Antonio Fernández fueron múltiples y de lo más variadas en la jornada de ayer. Diferían, lógicamente, en función de quién las realizaba. Pero todos, sin excepción, coincidían en señalar que se trata de uno de los ilustres de la política andaluza de los últimos años.

Nacido en Jerez en el año 1956, tiene dos hijos, es licenciado en Derecho por la Universidad de Sevilla y fue profesor asociado, tanto en este centro de la capital hispalense como en la Universidad de Cádiz. Trabajó también en las asesorías jurídicas de CC OO y UGT, donde cuentan que empezó a relacionarse con pesos pesados de la actividad pública, unas relaciones que habrían sido determinantes para su posterior salto a la política.

Fue concejal del Ayuntamiento de Jerez durante once años y diputado provincial durante siete. Saltó a la Administración autonómica en 1994 como delegado provincial de Agricultura y Pesca en Cádiz. Un año después fue nombrado viceconsejero de Trabajo y Asuntos Sociales y en 1996, viceconsejero de Empleo y Desarrollo Tecnológico, así como vicepresidente del Instituto de Fomento de Andalucía. Su carrera política llegó a su punto álgido en 2004 con su nombramiento como consejero de Empleo de la Junta, cargo en el que fue relevado ayer por José Antonio Griñán.

Últimamente no se le veía demasiado por Jerez. Eran escasos los actos públicos a los que asistía. Su más que conocida 'enemistad' (política) con la alcaldesa, Pilar Sánchez, podía ser una de las razones. La química entre ellos brilla por su ausencia desde hace tiempo, aunque ambos han intentado mantener el tipo y la compostura cada vez que se les ha visto juntos en cualquier acto.

Se había llegado a especular, recientemente, con la posibilidad de que fuese una de las alternativas más firmes a la propia alcaldesa jerezana para encabezar la lista del PSOE en las próximas elecciones municipales. En el propio partido había quien seguía sosteniéndolo recientemente, la semana pasada incluso.

Pero su carrera política parece que, salvo sorpresa mayúscula, puso ayer su punto y final. Tras su reunión con José Antonio Griñán, Antonio Fernández se limitó a comentar a los periodistas, que le aguardaban para recabar sus impresiones, que él siempre está feliz. Pero fuentes próximas cuentan que en realidad estaba «muy tocado». Aunque se había especulado con su salida del Gobierno autonómico, no se la esperaba. Parece que necesitará todavía un poco tiempo para digerirlo del todo.