Chile será dirigido por un Gobierno de empresarios

A menos de un mes de asumir el cargo, el presidente electo de Chile, Sebastián Piñera, ya tiene a su equipo de Gobierno. Sus nuevos ministros, sin embargo, no han podido disfrutar de los tradicionales cien días de gracia. Nada más ser presentados en un acto por todo lo alto, el futuro mandatario cosechó una oleada de críticas por su marcado perfil técnico y su escasa experiencia política. Después de 20 años de Ejecutivos de la Concertación entre democristianos y socialistas, los escogidos de Piñera, primer mandatario conservador elegido por el voto popular en el país sudamericano en más de medio siglo, se parecen demasiado al 'staff' de una compañía privada.

El diario chileno 'La Nación', identificado con la actual coalición gobernante, tituló su información sobre la presentación de los ministros con un elocuente 'Gabinete de gerentes para Chile S. A.', una circunstancia que la oposición tampoco desaprovechó. A su juicio, el nuevo Gobierno, compuesto por 16 hombres y seis mujeres, carece de diversidad.

Los colaboradores de Piñera deberán renunciar, a más tardar el 28 de febrero, a sus cargos en consejos de administración o fundaciones, y deshacerse de su participación en negocios que tengan vínculos con sus carteras. Al menos 10 ministros forman parte de la dirección de conocidas empresas. Hay ocho economistas y siete ingenieros.

El futuro canciller es Alfredo Moreno, directivo y accionista mayoritario de la próspera cadena de tiendas Falabella, con sedes en Chile, Argentina y Perú, y no tiene antecedentes políticos. Moreno prometió volcarse en su nuevo trabajo, pero su colega peruano, José García Belaunde, ya le ha asestado el primer golpe. «No sé mucho de él, salvo que es un empresario exitoso», declaró.

En Educación, Sebastián Piñera designó a Joaquín Lavín, el dirigente más derechista de la futura alianza gobernante. Funcionario durante la dictadura de Pinochet, fue el eterno rival del presidente electo en las pugnas internas para elegir al candidato conservador. Eso sí, ya le ha prometido a Piñera que dirigirá su departamento desde la moderación. Algunos observadores creen que el mandatario electo pretende terminar con las aspiraciones presidenciales de Lavín poniéndole al timón de un ministerio conflictivo. El nuevo titular de Educación es propietario de la Universidad del Desarrollo, símbolo de la enseñanza privada en Chile.

Conflictos de intereses

En el área de Salud, el ministro será Jaime Mañalich, director médico de la clínica Las Condes, una de las propiedades emblemáticas de Piñera, quien anticipó que el martes venderá su parte en el accionariado. La portavoz del gabinete, Ena von Baer, anticipó que los conflictos de interés se resolverán antes del prócimo 11 de marzo.

La oposición de centroizquierda, sin embargo, se prepara ya para dar la batalla en el Congreso. La Concertación pretende dejar lista para su aprobación antes del juramento de la nueva cámara una ley que evite que los intereses privados copen el Estado. El futuro Gobierno ya ha reaccionado anunciando a través del recién designado titular de Interior, Rodrigo Hinzpeter, que respaldarán el proyecto.