El Nazareno vive una Madrugá histórica en San Fernando

Volvía La Madrugá a San Fernando y la noche no defraudó. A las 02:00 horas se abrían las puertas de la Iglesia Mayor Parroquial ante una gran expectación de fieles que se congregaban en la Calle Real. Una salida para el recuerdo, con los isleños acompañando a Jesús Nazareno y a la Virgen de los Dolores en los primeros metros de su Estación de Penitencia.

El Nazareno fue la guinda al pastel de una jornada de Jueves Santo muy especial en La Isla. Un reencuentro de la ciudad con la cofradía, pero también de la cofradía con la ciudad. Daniel Robledo, director espiritual de la cofradía ejecutó la primera levantá y en el recuerdo estaban en todo momento todas las víctimas de la pandemia.

Transcurrió una hora cuando la cruz de guía hacía su entrada en la carrera oficial mientras un silencio casi sepulcral creaba una atmósfera pocas veces vivida en La Isla.

La única nota negativa de la noche se produjo en torno a las 04:00 horas, en su paso por el Ayuntamiento, cuando un nazareno se desmayaba fruto del cansancio y tenía que ser atendido por los servicios sanitarios.

La hermandad quiso reconocer la labor de los cuerpos y fuerzas de seguridad el estado dedicándole una levantá .

Una noche que San Fernando estaba esperando desde hace tres años y que no defraudó. El Nazareno volvía a salir a calle, el pilar fundamental en La Madrugá isleña, y por un momento, todo el pasado de restricciones parecían caer en el olvido.

Los aplausos y ovaciones al Nazareno y a la Virgen de los Dolores no faltaron y San Fernando recuperó su Madrugá.