Y el manga explotó

Tokio, 16 de julio de 1988. En completo silencio, en medio de la ciudad, un destello. Después, una inmensa bola negra se expande para arrasar finalmente toda la urbe, con un poder muy superior a la bomba atómica que destrozó la ciudad japonesa de Hiroshima en 1945. Tras lo que parece el fin del mundo, comienza la III Guerra Mundial. En 2019, 31 años después, la nueva ciudad de Neo-Tokio representa el 'cyberpunk' más decadente. Empieza a sonar una percusión vertiginosa y unas motos circulan por las oscuras calles dejando destellos hipnóticos.

El comienzo de la película 'Akira', que se estrenó en Japón en 1988 -en España, 1992-, es recordado como una de las obras maestras del séptimo arte. El largometraje supuso el salto definitivo del manga y 'anime' japonés al mundo occidental y, tras ellos, toda la cultura nipona. Pero la primera avanzadilla la realizó el manga en el que se basaba la producción cinematográfica.

Katsuhiro Otomo -Miyagi (Japón), 1954- comenzó a publicar una nueva serie en cómic en la revista japonesa 'Young Magazine'. Supuso una revolución del género. El guión, referente de la ciencia ficción post apocalíptica; la estética, abanderada del 'cyberpunk' e inspirada en películas de la época como 'Blade Runner', de Ridley Scott; y el formato, apostando por el tradicional blanco y negro del manga pero innovando al incorporar vistas propias del cine, la convirtieron en un éxito automático. Y el triunfo duró ocho años, los que Otomo dedicó a contar su historia en más de 2.000 páginas que son imperdonables para cualquier coleccionista de cómic. Uno de los grandes maestros del cómic, Jean Giraud, Moebius, era un gran admirador de 'Akira' e hizo alguna ilustración basada en sus personajes y este año, Otomo fue incluido en el 'Salón de la fama' de los premios Eisner, considerados los 'oscar' del cómic.

El argumento muestra un mundo destruido donde unos jóvenes inadaptados, liderados por Kaneda, se dedican a pasear con sus motos y a luchar contra bandas rivales. Uno de los integrantes del grupo y amigo de la infancia del protagonista, Tetsuo, tiene un accidente al evitar atropellar a un niño con cara de anciano. A continuación, se produce su secuestro por parte de una entidad gubernamental que está experimentando con un arma definitiva de inmenso poder. Kaneda intentará rescatarlo junto con una organización terrorista, pero Tetsuo no estará por la labor de abandonar su nuevo y poderoso don, lo que desencadena una tensión destructiva y la amenaza, de nuevo, del fin del mundo.

Más allá de Japón

Esta sensación del manga traspasó las fronteras niponas al ser traducida en EE UU por Marvel cómics en 1988. Para adaptarlo al lector norteamericano, se coloreó toda la obra. Como esto era una labor titánica para un cómic con tal volumen de páginas, se realizó por ordenador por primera vez en la historia. También fue pionera en ser el primer manga que triunfó internacionalmente.

Llegó a España en 1990, de la mano de Ediciones B y Glénat, triunfando al igual que en resto del mundo. Años más tarde, Norma Editorial reeditó la obra a partir de la versión americana, lo que supuso muchas críticas por parte de los lectores, ya que el color resultante dejaba mucho que desear.

Se espera que la editorial lo haya enmendado en la edición 'Akira 30 aniversario' del cómic que ya está puesta a la venta. El paquete incluye los seis tomos del manga a color, el libro 'Akira club' -un 'artbook' que ya se publicó en 2007 y que incluye detalles, imágenes inéditas y portadas del manga- y un set de postales exclusivas. Todo en una caja bastante pesada y una bolsa especial para poder transportarla. El precio, 120 euros, una cuantía razonable ya que los tomos de la edición convencional cuestan 119,70 euros. Aunque ya quede poco tiempo, una lectura indispensable antes del fin del mundo.