Quince años por degollar a su bebé con unas tijeras

La Sección 23 de la Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a Rosario Edith A.G. a la pena de quince años de prisión por la muerte violenta de su bebé en el año 2010 en Pozuelo de Alarcón (Madrid), conforme al veredicto de culpabilidad expresado por un jurado popular. En la sentencia, el tribunal ha considerado a Rosario Edith A.G., de 24 años y de nacionalidad mexicana, responsable de un delito de asesinato con la concurrencia de la circunstancia atenuante analógica de trastorno mental y la agravante de parentesco.

El tribunal ha declarado probado que el 11 de junio de 2010 Rosario Edith, sin antecedentes penales y en situación regular en España, cuando trabajaba como interna en un chalé situado en el paseo de los Lagos, dio a luz a un niño vivo, que pesó 3.010 gramos. Según el fallo, la mujer cogió unas tijeras y se las clavó en el cuello al bebé varias veces, en la zona yugular, en la zona suboccipital y en la zona submandibular, causándole "una hemorragia masiva que le produjo la muerte".

La Fiscalía solicitó para la procesada una pena de quince años de prisión por un delito de asesinato con la circunstancia agravante de parentesco y la atenuante de trastorno mental en sus conclusiones definitivas, a las que se adhirió la abogada de la acusada.

Durante el juicio, la procesada aseguró que dio a luz al bebé de forma inesperada y cuando se encontraba sola en el dormitorio de la casa donde trabajaba como empleada de hogar interna. Rosario Edith, que se encuentra en prisión provisional por estos hechos desde el 12 de junio de 2010, reconoció que cogió una tijeras y se las clavó al bebé en el cuello más de una vez. Después apartó el cadáver, limpió la habitación, metió el cuerpo del niño en unas bolsas de basura y lo guardó en el cajón de un armario. Ese mismo día fue a ver al médico porque la vieron "mal" y cuando se encontraba en el hospital reveló dónde estaba el niño.