Barreda equipara a Cospedal con la ultraconservadora Sara Palin

José María Barreda, ha encontrado la mejor manera de estigmatizar a su rival en Castilla-La Mancha, la comunidad autónoma donde el PP ha puesto todo el foco de la campaña para el 22-M. El presidente ha comparado hoy a María Dolores de Cospedal con la líder del ‘tea party’ y antigua aspirante a la vicepresidencia de los Estados Unidos por el partido Republicano, Sarah Palin: "buena presencia, agresiva -ha dicho- pero con poco fondo".

En comunicación política pocas cosas son más eficaces que encontrar dos palabras capaces de crear de un solo brochazo todo un marco conceptual. El nombre de Palin logra eso. La política, originaria de la fría Alaska, representa al ala más radical del ya de por sí conservador partido republicano. Y eso es precisamente lo que quieren agitar los socialistas. Su principal estrategia para estos comicios consiste en identificar a los populares con la derecha extrema con la esperanza de que sus desmotivados votantes reaccionen.

El PSOE es plenamente consciente de que el grueso de las deserciones entre el electorado de izquierdas se deben al ‘tijeretazo’ social llevado a cabo por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero para cumplir con los requisitos de reducción del déficit acordados por la UE en plena crisis del euro. Y ahora tratan de salvar los muebles persuadiendo a sus simpatizantes de que el PP habría sido y será aún menos mirado porque carece de conciencia social.

La ministra de Defensa, Carme Chacón, lo defendió anoche en su acto en Tomelloso de esta manera: "Con Mariano Rajoy no habría ni menos crisis ni menos paro, lo que habría es menos Estado de Bienestar". Esta mañana, en un desayuno con la caravana de prensa nacional que cubre los actos del PSOE, Barreda ha insistido en la misma idea pero además ha dado un paso más allá. Ha asegurado que para más inri Cospedal no conoce Castilla-La Mancha.

Campaña regional

A su juicio, esa es su ventaja frente a la secretaria general del PP. A pesar de que las encuestas están ajustadas, el presidente castiellano-manchego ve posiblidades de victoria porque todas las encuestas le dan mejor valoración ciudadana que a su oponente. Por eso, ha decidido contar con la ayuda de dirigentes nacionales de su partido para movilizar al electorado pero no coincidir con ellos jamás. Así preserva su imagen pseudo-independiente, él que fue uno de los ‘barones’ socialistas que más presionó para que Zapatero colgara los hábitos y dijera que no repetirá como candidato.

Barreda ha ofrecido, aún así, otra explicación. Según él, si ayer no estuvo con Chacón (buena amiga personal), el viernes no estuvo con Blanco en Cuenca y tampoco estará el próximo lunes con Rubalcaba en Toledo, es sólo para aprovechar mejor los recursos. "Es más útil estar en dos sitios porque la suma de esfuerzos multiplica los resultados; que nadie piense otra cosa", ha dicho.

Los socialistas insisten en que esta decisión se ha sacado de quicio. Y recuerdan que también Alberto Núñez Feijóo optó por ese modelo en las elecciones gallegas de 2009 en las que logró la victoria. Rajoy, dicen, pasó allí toda la campaña y cada uno tenía su propio acto.

El dirigente regional ha añadido, además, que cuando se organizó el mitin de la ministra de Defensa él ya tenía previsto otro acto en Hellín, se había comprometido con mucha gente y se había hecho un gran esfuerzo.