Las cuentas de las empresas municipales tampoco convencen a la oposición

Los Presupuestos para 2016 siguen dando que hablar cuando ni siquiera se han presentado todavía. Si ya se ha criticado por parte de la oposición el borrador entregado para su estudio previo por parte del equipo de Gobierno, por contener numerosos defectos tanto de forma como de contenido, según explican, a ello hay que sumar que se había pasado por alto un paso previo imprescindible para llevar al Pleno las cuentas, que es la aprobación de los presupuestos de los distintos organismos autónomos y empresas municipales.

Esta misma semana se han convocado a toda prisa para dar cumplimiento al trámite, pero de nuevo las cuentas presentadas han dejado a toda la oposición insatisfecha. Ayer, tanto PSOE como Ciudadanos coincidieron en criticar que «los responsables municipales han traído unos presupuestos de cinco organismos autónomos y seis empresas municipales que son muy genéricos y en los que no se detallan los gastos e ingresos». Esta sería la norma, a excepción, según dejaron claro ambos partidos, de las cuentas de Procasa.

Los representantes de Ciudadanos pusieron el acento en las cuentas del Instituto Municipal de Deportes, que cuenta con el mayor presupuesto de todos los organismo autónomos –6 millones de euros– y donde las principales partidas de gastos se presentan bajo epígrafes genéricos y nada concretos. Esto, a pesar de que el equipo de Gobierno decía posteriormente que no habrá problema en entregar a la oposición toda la información requerida.

El concejal socialista Juan Cantero se quejó de que «en el mejor de los casos, hemos recibido las cuentas de los organismos autónomos y las empresas municipales con 48 horas de antelación, incumpliendo así el acuerdo al que se llegó al principio de la legislatura en el que se comprometían a convocar y enviar la documentación de estos entes con cinco días de margen. Con estos modos, dificultan mucho el trabajo de la oposición, pues no disponemos del tiempo suficiente para analizar las cuentas».

A pesar de todo salieron adelante todas las cuentas con la abstención de Ciudadanos y PSOE y los votos en contra del PP, para evitar que el equipo de Gobierno les pueda acusar de poner impedimentos a su gestión. La excepción fue la empresa Cádiz 2000, donde la abstención del representante de Ganemos (socio de gobierno de Podemos), tumbó las cuentas.