NOMBRAMIENTO

Un viejo conocido al frente de la Guardia Civil de Cádiz

El coronel gaditano Alfonso Rodríguez Castillo asume el mando del acuartelamiento de la capital

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La Comandancia capitalina tiene al frente desde hoy a un coronel de sobra conocido por muchos de los efectivos que ahora están bajo su mando. Alfonso Rodríguez Castillo (Cádiz, 1958) asumía esta mañana su nuevo cometido en un acto castrense celebrado en el patio del acuartelamiento gaditano. Castillo (así lo llaman entre los agentes) ya estuvo destinado y asumiendo responsabilidades en la Comandancia de Cádiz como teniente coronel y comandante entre 1998 y 2008.

Durante ese periodo coordinó el Plan Infoca en la provincia y otros dispositivos que blindan la seguridad de eventos masivos como el Gran Premio de Motociclismo de Jerez. Por eso, nada más iniciar su discurso, sus primeras palabras fueron de agradecimiento a los responsables del Instituto Armado, como el director general, que habían autorizado su nombramiento como nuevo jefe de la Comandancia de Cádiz. Se cumplía el sueño de todo gaditano: poder regresar a su tierra tras subir un peldaño más en su carrera profesional.

El acto celebrado esta mañana estuvo presidido por el general de brigada jefe de la 4º Zona en Andalucía, Laurentino Ceña, y como máxima autoridad civil, la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo. Además de los actuales representantes de la Junta y del Estado en la provincia, el presidente de la Audiencia y la fiscal jefe, también ha asistido el anterior subdelegado del Gobierno, Sebastián Saucedo, con quien trabajó estrechamente Alfonso Rodríguez Castillo. En la bancada de invitados se pudo ver al general Alfonso Escuer Mur, quien fuera jefe de la Comandancia hasta 2010.

La liturgia en la toma de posesión fue la misma que se repite cada vez que se produce un relevo en la jefatura del acuartelamiento. Donde sí se salió de la norma el nuevo jefe del acuartelamiento fue en su discurso, en el que se comprometió a trabajar por mejorar la conciliación entre la vida personal y profesional de los agentes. También se refirió a su apuesta por la formación continua: «promoviendo programas y convenios de colaboración con la Universidad de Cádiz y otras instituciones, o actualizando los ya existentes». Unas aspiraciones no sólo para este colectivo de naturaleza militar sino también para numerosos trabajadores civiles de la empresa pública y privada.

Un discurso moderno, pero también comprometido con los habituales mensajes que emanan desde los mandos de un cuerpo jerárquico y militar. Así, el nuevo coronel habló de «sentido del honor, disciplina, disponibilidad, eficacia, espíritu benemérito y amor al servicio».

En la alocución del nuevo jefe de una dotación que ronda los 1.600 agentes, las menciones a su estrecha vinculación profesional con su tierra natal fueron constantes. Así recordó como tres figuras importantes en su vida personal como su padre, su suegro y su hermano habían sido guardias en la Comandancia que ahora le toca dirigir. También tuvo palabras para su mujer y sus hijos, a los que agradeció su paciencia y comprensión en esos traslados por cambio de destino, que Castillo definió como una forma de hacer «turismo verde».

IMÁGENES DEL ACTO DE TOMA