La Moraíta, una compañía ‘low cost’ y con sentido del humor

Richard, nacido en Gibraltar y residente en Cádiz, es un representante de artistas de medio pelo. Junto a Amelie, una joven promesa del cine francés, prepara un espectáculo para un casino de Las Vegas o para el Eurovegas. Un montaje en el que el espectador asiste a la selección de números que ellos creen que van a ser el impacto del momento, una mezcla imposible de magia, malabares, monólogos, ‘extrem’, canciones, coreografías... Richard, que sabe de todo, menos lo que hay que hacer en todo momento, y Amelie con su alta concentración de feromonas dispersas, se preparan para salir del anonimato. Muy pronto se presentan en público, con su propuesta fresca y descarada.

Detrás de Richard está el gaditano Javier Sánchez y la sevillana Beatriz Torres se esconde tras la sensual francesita. Asesorados por Mikel Crespi, uno de los fundadores de La Cubana, han creado su propia compañía, La Moraíta, que se estrenará a principios de marzo en el mismo lugar en el que se fraguó este nuevo y valiente proyecto, La ofendida, en Cádiz. El espectáculo de creación de los tres componentes –Crespi ejerce de director– se llama ‘Salidos del vértice’, un divertimento para la época, un espectáculo ‘low cost’ con todos los ingredientes para divertir al espectador.

Sello cómico

Compañía y obra nacieron a la vez. Mikel Crespi impartía en la escuela La ofendida un curso en el que Sánchez y Torres resultaron ser los alumnos más aventajados. Para las clases, inventaron a estos locos personajes y el actor y ‘coach’ de actores catalán les propuso montar el grupo y llevar ‘Salidos del vértice’ a escena. «Las señas de identidad de esta compañía son el trabajo de personajes y la diversión», explica Crespi, que periódicamente baja a Cádiz para ensayar con los dos actores. «Es una motivación para ellos. No hemos hecho esto para perder el tiempo, estar aquí significa muchas cosas» cuenta el director, que piensa trasladar parte de su trabajo en su compañía Zootroupe a los chicos de La Moraíta. «Montamos cosas con los medios que tenemos y vamos a tirar para delante, después podemos diversificarnos o incluso incluir a nuevos miembros». Crespi se refiere a que hoy están con ‘Salidos del vértice’, pero mañana pueden dedicarse a los monólogos o la magia. Cualquier modo de expresión, pero con un claro sello cómico.

Como Richard y Amelie, creados en aquellas clases y vestidos y matizados en cada ensayo. «Lo que nos interesan son los personajes locos, que sean soñadores. Les pueden o no salir las cosas, pero al menos lo intentan. Son personajes luchadores y divertidos», cuenta el fundador de La Cubana. La nueva compañía, con sus planes de diversificación, seguro que emprenden una carrera de éxito. «Es muy relativo lo de la crisis. Si te dedicas a lo que te gusta te pueden salir oportunidades. En la Zootroupe, por ejemplo, trabajamos en fiestas privadas, eventos singulares, ferias, hoteles... A veces uno solo; otras, toda la compañía», dice Crespi.

Lo cierto es que en Cádiz ya hay una nueva compañía, y para hacer reír además. Habrá que seguirle le pista.