La madre de Rubén no perdona los insultos de Chari

Tanto va el cantaro a la fuente que al final se rompe. Eso es lo que han pensado muchos seguidores de Gran Hermano y de El Reencuentro al ver el último altercado que el viernes por la noche protagonizaron los gaditanos Rubén y Chari. Tras una fiesta los concursantes pasaron del amor (con escenita de jacuzzi incluida) al odio en solo unos minutos.

Los celos de Chari por la complicidad entre Chiqui Martí y Rubén fueron el detonante de la fuerte discusión en la que ambos se enzarzaron con el resto de concursantes como testigos. Cuando parecía que mejor se llevaban y que habían arreglado sus diferencias sobre el asunto de la supuesta relación fugaz entre la gallega Saray y Rubén, la chispa de los celos se le volvió a encender a Chari cuando tras pasar un rato con el isleño en el jacuzzi descubrió a Chiqui «tonteando» con su exnovio. Entonces la pelea subió de tono. Chari llegó a llamar a Rubén hijo de puta y también a Carmen, la madre de éste; lo que provocó las escenas más violentas.

Explicaciones, verguenza y disculpas'

Después de ser expulsados el sábado por la organización, anoche, Rubén y Chari daban explicaciones en El Debate. A las preguntas de Christian Gálvez, el concursante dijo sentirse «fatal» por tener que salir por «la puerta de atrás» y por «haber fallado» al programa. Chari sin embargo se centró más en lo que lo sucedido supondrá en su relación con Rubén, completamente rota. «Estoy arrepentida de lo que ha pasado, sé que tengo un carácter muy impulsivo y dije cosas de las que me arrepiento totalmente. Lo que más siento es el insulto que le dirigí a la madre de Rubén, que no se lo merecía para nada, pero estaba en un momento de calentón y me salió así. He pasado muy mal día, esto es como una pesadilla».

A las palabras de la gaditana, Carmen, la madre de Rubén respondió de forma clara y descartó aceptar sus disculpas. Tanto Chari como Rubén admitieron tras ver la escena en plató que se había faltado el respeto y que se avergonzaban de lo ocurrido.