El Racing, en plena caída libre

La segunda vuelta de la competición no ha empezado nada bien en el Portuense. No en vano, con el de ayer frente al Marinaleda, el equipo racinguista acumula su cuarto encuentro con derrota, al tiempo que continúa con su ineficacia ofensiva (cero goles en dichos partidos).

Por si fuera poco, y al contrario de lo acontecido en Ayamonte, el juego exhibido por los hombres de Javier Manzano fue realmente malo. Y es que, el Racing no sufrió una derrota más severa porque los sevillanos no se emplearon a fondo. Tanto es así que muchos aficionados abandonaron el campo antes de terminar el partido, al tiempo que algunos de los que se quedaron mostraron su disconformidad. Por si fuera poco, hasta el propio Javier Manzano aclaró en la rueda de prensa posterior al partido que su equipo no había competido.

La primera ocasión del Portuense tardó bastante en llegar. Fue a los 25 minutos y Villalustre pudo adelantar a los locales con un remate de cabeza, pero el tricolor Bubu evitó el gol bajo palos. Curiosamente, el propio Bubu fue el autor del primer gol del Marinaleda al filo del descanso. Sin lugar a dudas, un duro varapalo para los rojiblancos, que no se repusieron del golpe sufrido.

Con más corazón que cabeza

En la segunda mitad tampoco cambió el decorado. Así las cosas, el conjunto de Juanmi Puentenueva consiguió el segundo gol a los 57 minutos. Ávalo no desaprovechaba la ocasión y batía a Ismael.

Bien es cierto que al Portuense le quedaba un mundo por delante, pero los gaditanos apenas inquietaron el marco defendido por Casi. De hecho, la entrada del espigado Villalba como segundo delantero no fue suficiente, ya que los del Cuvillo se estrellaban una y otra vez ante la muralla visitante. Al igual que en la primera mitad, la ocasión más clara la tuvo Villalustre. En esta ocasión, el atacante disparó y el propio Casi tuvo que emplearse a fondo para evitar que el Racing recortara distancias (77').

En el último cuarto de hora, el Portuense se fue arriba más con el corazón que con la cabeza, de ahí que la derrota pudiera ser más abultada, ya que el Marinaleda erró en varias jugadas de contragolpe.

En definitiva, partido para pasar página, donde el Marinaleda se llevó los puntos sin despeinarse.