«Barack Obama bien vale una misa»

«Obama bien vale una misa». Soraya Sáenz de Santamaría tiró de historia para ironizar sobre la próxima visita de José Luis Rodríguez Zapatero a Washington para asistir al 'Desayuno de Oración Nacional'. La dirigente opositora situó al presidente del Gobierno al nivel de Enrique IV, que en 1593 abjuró del protestantismo para pasarse al catolicismo con tal de convertirse en rey de Francia, pues Zapatero, un laico confeso, está dispuesto a darse un baño de religiosidad si con ello puede volver a verse con Barack Obama. Para la portavoz del PP en el Congreso, el encuentro del 4 de febrero entre presidentes es una muestra de la flexibilidad de sus convicciones en aras de sus objetivos. Subrayó que Zapatero, «puesto a gastar», no ha dudado en «gastar sus propios principios» para lograr una nueva foto con Obama. «Hay que ver dónde vamos a ver a un laico», exclamó.

El 'Desayuno de Oración Nacional' es un acto organizado todos los primeros jueves de febrero desde los tiempos de la 'Gran Depresión' por 'The Fellowship', una organización cristiana conocida en Estados Unidos como 'La Familia' y de muy marcado tinte conservador.

El Gobierno no quiso adentrarse en controversias de religión y la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, aseguró que Zapatero se siente «honrado» con la invitación porque podrá «compartir una tradición tan relevante para la sociedad norteamericana». Admitió, no obstante, que la presencia del presidente del Gobierno en ese tipo de actos puede chirriar, no tanto por su reconocida laicidad sino porque es un acto religioso «diferente» a lo que se acostumbra en Europa. De la Vega defendió tras el Consejo de Ministros que «siempre es importante» aceptar la invitación de un presidente de Gobierno de «cualquier país», aunque en esta ocasión no es Barack Obama quien va a ejercer de anfitrión, pues su papel se limita a participar en el desayuno religioso y pronunciar un discurso. Los organizadores son las autoridades del Congreso norteamericano a través de 'La Familia', y constituye uno de los actos relevantes de la vida política norteamericana, ya que reúne a la flor y nata de la política y el empresariado de ese país, así como a invitados de todo el mundo. El último invitado de honor a la reunión fue el ex primer ministro británico Tony Blair.

Fuentes gubernamentales también eludieron el sesgo cristiano de la visita y dijeron que el jefe del Ejecutivo hablará de cuestiones «éticas y de valores» en su discurso en el hotel de Washington donde se celebra el acto. Subrayaron además que es el segundo encuentro a solas con Obama, el anterior fue el 13 de octubre en la Casa Blanca, a los que se tienen que sumar las conversaciones más informales mantenidas en las cumbre de la OTAN en Estambul, en la de la UE con Estados Unidos en Praga y en la reciente del Cambio Climático en Cophenague.