El nuevo embajador de Estados Unidos busca estrechar relaciones

El nuevo embajador de Estados Unidos en España, Alan Solomont, llegó ayer a España, un año después de que su antecesor, Eduardo Aguirre, abandonara el cargo. Nada más aterrizar, se desplazó al Ministerio de Asuntos Exteriores para reunirse con Miguel Ángel Moratinos, con quien abordó el estado de las relaciones bilaterales, unos vínculos que el representante de Barack Obama se comprometió a fortalecer.

Solomont señaló que mantuvo «un muy buen encuentro» con el jefe de la diplomacia española, del que no dio detalles, ni tampoco lo hizo el Ministerio. Antes, había indicado que su misión se centrará en buscar «oportunidades» para estrechar las ya «estrechamente entrelazadas» relaciones entre los dos países. Una de las primeras misiones del nuevo embajador será preparar el terreno para la cumbre Unión Europea-Estados Unidos, que se celebrará en mayo próximo y que posibilitará la primera visita de Obama a España. Ese viaje pondrá fin a nueve años sin que ningún presidente norteamericano pisase a Madrid. La última visita fue la de Bush en junio de 2001, en el segundo mandato de Aznar.

Después, las diferencias entre el anterior inquilino de la Casa Blanca y Rodríguez Zapatero frustraron los contactos bilaterales. El viaje de Obama no será, de todos modos, una visita oficial sino que será un encuentro multilateral en el que participarán los presidentes de los países de la UE con Zapatero como anfitrión. Para esa visita oficial no hay fecha, pese a que el Gobierno da por hecho que se producirá en esta legislatura en devolución a la que hizo el Presidente en octubre a Washington.