En esta historia estamos todos

De forma periódica, la Historia nos demuestra que la Humanidad ha pasado por situaciones críticas, en la mayoría de los casos, motivadas por conflictos bélicos, en los cuales se ha dado rienda suelta al lado más retorcido y oscuro de los seres humanos.

Pero también estas catarsis colectivas nos han ofrecido la oportunidad de parar y reflexionar sobre el rumbo que señala nuestros hechos. Y según nos acercamos a los tiempos actuales, es de resaltar que estas confrontaciones tienen a unos pocos protagonistas, que con sus razones egoístas y de poder nos han marcado el paso al resto de las personas. Estos poderes siempre han sabido adaptarse a los tiempos y camuflar sus intenciones en medio de una maraña de discursos ampulosos, de legalidades basadas en la injusticia y el orden establecido, cimentándolo sobre los sueños rotos de la ciudadanía.

Hoy ese statu quo lo mantienen algunos dirigentes políticos que apuntados en las nóminas de las grandes trasnacionales, continúan dando aire a esa visión deshumanizada, que sigue considerando a la pobreza como una fuente inagotable de riqueza. Pero tú y yo sabemos que la siesta se está acabando. Cada día son más las personas que se niegan a admitir que la verdadera dimensión de la Humanidad sólo es comprensible desde el punto de vista económico. Todas nuestras inquietudes y sentimientos sometidos a una camisa de fuerza que se renueva cada día con los índices de las bolsas.

Tantas veces ha sido repetido el discurso de lo inevitable, de asumir con cierta lógica la existencia indigna de casi la mitad de los habitantes del planeta, que hemos llegado a un punto en el que hasta la atmósfera nos manda señales de advertencia. El equilibrio se esta rompiendo y lo que realmente está en juego es la casa de todos. Y llegados a este punto el ideal de otro mundo más justo y solidario es posible, se hace vital que empiece a tomar forma.

Algunos de los artífices de esta nueva esperanza, pero activa, son las Organizaciones no Gubernamentales que canalizan y aglutinan todos esos valores naturales y de equidad que el reto del cambio climático nos demanda con total urgencia. Hasta ahora nuestros dirigentes han tomado las decisiones y prioridades según sus intereses sin contar con nosotros, pero los tiempos están cambiando y ya esa partitura repleta de gráficos y cuentas de resultados no nos resignamos a seguir tocando. Una de las muchas organizaciones que han compuesto otra nueva música para otro nuevo mundo es Intermon Oxfam, que lanza una campaña de movilización social, en unión a la Coalición Clima, donde se encuentra otras organizaciones de distinta índole, pero con el objetivo común de remarcar con claridad, la trascendencia que tiene para todos nosotros resolver la asignatura del cambio climático. Para este fin de semana, en la ciudad de Cádiz y en una de las plazas mas emblemáticas para la ciudadanía gaditana, como es la del Palillero, ha instalado una escultura que representa a una mujer africana, de rodillas, doblada por el peso de una lavadora, donde aparecen los rostros de nuestros dirigentes políticos, como símbolo de la carga pesada que deben soportar los países más pobres, a la hora de limpiar la contaminación de los países ricos e industrializados. Esta instalación permanecerá hasta el próximo viernes día 20. Durante esos días se recogerán las firmas de las personas que quieran hacer sentir su voz a nuestro Gobierno para que cumpla sus compromisos de reducción de gases de efecto invernadero.

Ha llegado el momento de aceptar la responsabilidad de actuar en conciencia de forma personal y desde esta vertiente individual, conectar con la colectiva, con el propósito de que en la próxima cumbre de las Naciones Unidas que sobre el cambio climático se va ha celebrar en Copenhague (Dinamarca) se tomen las decisiones y medidas oportunas que den un rayo de esperanza a ese otro mundo más sostenible y solidario.

Si honestamente estábamos esperando un tema lo suficientemente trascendente para dar lo mejor de nosotros, una cuestión que nos unificara, que llegara a tocar la fibra sensible de cada uno de nosotros, ese tema tiene por nombre cambio climático.

El cambio climático representa esa gran obra que nos da trabajo a todos, por que no excluye a nadie, todos somos importantes y todos somos necesarios. Lo bueno de esta historia, es que todos somos protagonistas. No dejemos pasar esta nueva oportunidad, por que en realidad tú y yo sabemos que todo esta por empezar.

Bienvenidos a las obras que desde el techo (la atmósfera) comenzamos aquí y ahora en la tierra. A remangarse y al tajo.

No siempre los cimientos están en el suelo.