¡No sin mis Jimmy Choo!

Hasta los empleados de H&M salían hoy a aplaudirles por la espera. El madrugón ha merecido la pena. Los primeros 160 de la cola han conseguido una pulserita que les da acceso directo a la zona Vip en la que se venden los famosos zapatos y bolsos de Jimmy Choo. Los que no la han conseguido se tendrán que consolar con el resto de la colección, de acceso libre.

La locura se desata a las diez en punto. Los clientes más avispados arramplan con todo lo que hay a su alcance. En apenas cinco minutos ya no queda nada en las perchas. En los probadores, el caos; colas de nuevo y la satisfacción de verse con un modelazo de cine, las actrices más cool adoran a Jimmy Choo. En el perímetro restringido los privilegiados tienen 600 segundos para hacerse con los taconazos o los bolsos de sus sueños. Aquí cuestan hasta 10 veces menos. Cualquier cosa por parecerse a una celebrity.