Vista panorámica de la Gran Vía de Madrid, la ciudad mejor valorada en el ranking general, pese a que no destaca como lugar de residencia. / AP
Sociedad

Ciudades de dudosa reputación

El informe Merco Ciudad 2009 revela que los españoles no quieren vivir en las grandes capitales pese a ofrecer los mejores servicios, oportunidades laborales y ocio

MADRID Actualizado: Guardar
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Los miembros del COI no saben lo que se han perdido. Tenían la oportunidad única de organizar los mejores juegos de la Historia en la mejor ciudad de España. Se mire por donde se mire: por la Puerta de Alcalá, por los rascacielos de la Castellana o por sus 317 kilómetros de suburbano. Con corazonada o sin ella. Ya sea para hacer carreras, novillos, amigos, codos o dinero, Madrid encabeza el ranking de las localidades mejor consideradas del país. Y no lo dicen los inspectores del Comité Olímpico tras darse un garbeo de sólo cuatro días y saludar de lejos a la Almudena; lo han dicho 9.000 ciudadanos de toda la geografía nacional, incluidas Ceuta y Melilla, además de 150 expertos en gestión urbana.

Han sido consultados para elaborar el informe Merco Ciudad 2009, un macroestudio, tan exhaustivo como independiente, que ha examinado por segundo año consecutivo las 78 grandes ciudades españolas -de más de 100.000 habitantes o capitales de provincia- en relación con 250 indicadores: desde la limpieza o las comunicaciones, al orgullo de pertenencia, el tráfico o el nivel sanitario y de precios. Las asignaturas no son sencillas y, encima, no basta con aprobar. Hay que sacar mejor nota que los rivales, puesto que los resultados se hacen públicos en forma de ranking, para orgullo de los que ocupan el podio y sonrojo de quienes cierran la tabla.

El ego de Alcorcón

Aunque ya se ha lamentado lo suficiente que no vaya a ser olímpica, la medalla de oro en esta competición interurbana dirigida por Justo Villafañe, catedrático de la Universidad Complutense, se la ha llevado este año, igual que en 2008, Madrid. Sus vecinos estarán hasta el madroño de que Gallardón les suba los impuestos. Sin embargo, el estudio Merco Ciudad, basado en datos objetivos y en percepciones emotivas de los ciudadanos, viene a demostrar que el dinero no se está tirando a la basura, a ésa que tan cara sale. La capital del reino no sólo lidera la clasificación general entre las 78 grandes localidades, también encabeza cuatro de las seis subcategorías de análisis diferenciadas: es el mejor lugar para estudiar -por su oferta educativa de calidad-, para trabajar -por la demanda de empleo cualificado-, para divertirse -por ocio, turismo y patrimonio- y para hacer negocio -por los servicios para la empresa-.

Conste, eso sí, que en esto de las ciudades el tamaño sí importa: cuanto más grande, mejor reputación. Barcelona (951 puntos), Valencia (682), Zaragoza (645) y Bilbao (634), todas por encima de los 350.000 habitantes, siguen a Madrid (1.000) en la división de honor urbana. Da la impresión, además, de que se encuentran cómodas en la tabla, pues repiten la posición que ocuparon en el primer informe, el de 2008. Sexto y séptimo lugar son para Palma de Mallorca y Pamplona, que en doce meses han mejorado sensiblemente su consideración.

Duelo Hereu-Gallardón

Málaga, en octavo lugar, desciende un peldaño respecto al año pasado, pero aun así se convierte en la plaza andaluza mejor situada. Murcia, en cambio, sube del undécimo escalón al noveno y San Sebastián baja dos de golpe, del ocho al diez. Sigue teniendo motivo, no obstante, para tocar fuerte los tambores: de entre las capitales de menos de 350.000 habitantes, queda como la segunda mejor valorada, sólo por detrás de la cuna de San Fermín. Gijón, por su parte, se lleva el número uno como ciudad no cabecera de provincia. Cádiz mejora su posición con respecto al año anterior, pero sigue apareciendo muy abajo en la tabla: en el puesto 53. Jerez le saca ventaja, al situarse en el puesto 44. Algeciras, la otra gran ciudad de la provincia, sale bastante mal parada con un penúltimo puesto. Sólo tiene peor reputación Santa Coloma de Gramenet, y eso que las entrevistas telefónicas a los ciudadanos y la recogida de datos se llevó a cabo entre los meses de septiembre y octubre: días antes de que su alcalde, Bartomeu Muñoz, y su concejal de Urbanismo, Manuel Dobarco, fueran detenidos por presunto cohecho, tráfico de influencias y blanqueo de capitales.

Más honrosas se presuponen el resto de poblaciones relegadas a la parte baja del ranking y que comparten un denominador común: casi todas han crecido con bastante desorden y pocos medios alrededor de Madrid o Barcelona para aliviar sus problemas de espacio. Son los casos de Torrejón de Ardoz, Badalona, Hospitalet, Móstoles, Dos Hermanas o Alcorcón. Esta última escala dos posiciones respecto a 2008 e incluso cabe esperar que sus habitantes estén ahora todavía algo más satisfechos tras el 4-0 de David contra Goliat.

El duelo histórico, no obstante, se libra entre merengues y culés. A saber lo que pasará el 29 de noviembre entre Messi y Kaká, pero al menos entre Hereu y Gallardón los triunfos están bastante repartidos. Los urbanistas, ecólogos o sociólogos que participan y analizan la montaña de datos que componen Merco Ciudad consideran que la localidad con más alta reputación global es Barcelona, seguida de Madrid, Bilbao, Valencia y San Sebastián. Estos municipios, junto a Vitoria, encabezan la lista en consideración medioambiental, competitiva, social y democrática y de gestión municipal.

La gran paradoja

Irrumpen aquí los peros. Puede que exista la ciudad de la alegría, la de los muchachos o la perdida, pero la ciudad ideal no se ha descubierto todavía. No deja de resultar cuanto menos paradójico que las grandes capitales se consideren las mejores para trabajar, estudiar, divertirse o hacer negocios y, sin embargo, ninguna de ellas figure entre las preferidas para vivir. De Madrid al cielo... hay un trecho: cuando no se trata de ver a la señora Cibeles sino de soportar un señor atasco, cuando el objetivo no es salir de copas sino meterse en un piso y pagarlo, los españoles se decantan, en este orden, por Pamplona, Santander, Logroño, Murcia, San Sebastián, Albacete, Zaragoza, Oviedo, Gijón y Cáceres.

Estas mismas ventajas explican que los ciudadanos más orgullosos de su polis no sean los bilbaínos, sino sus rivales directos: los donostiarras. Tampoco andan escasos de ego los granadinos, segundos a la hora de fardar de ciudad. Ni la capital de España, ni Barcelona, ni el 'botxo' ni Valencia figuran entre las diez primeras plazas por orgullo de pertenencia de sus habitantes. A saber si hoy Sabina se bajaría en Atocha y se quedaría en Madrid...