Los responsables de COAG en Cádiz y Sevilla dieron ayer cuenta de la situación. / J. C. C.
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COAG plantará cara con movilizaciones a la actitud de la industria remolachera

Decidirá hoy si hay protestas a las puertas de la fábrica, ya que «quiere repartir la contratación como le viene en gana»

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Los remolacheros están en pie de guerra. A pesar del varapalo de la reforma europea y de los esfuerzos que han hecho los agricultores de la Zona Sur por el mantenimiento del cultivo, ahora es la industria la que no parece querer respetar los acuerdos. Así lo denunciaron ayer los responsables de COAG de las zonas afectadas, que no dudaron en anunciar «movilizaciones contundentes» si no se acercan posturas en el encuentro que hoy mantendrá la mesa interprofesional del sector.

El secretario provincial de COAG Cádiz, Miguel Pérez, señaló en este sentido que tratarán de frenar la intención de British Sugar de contratar «de modo unilateral» la remolacha correspondiente a la campaña 2009/2010.

Para «cuatro amiguetes»

La organización agraria tachó de «inconcebible» que la compañía propietaria de la azucarera quiera repartir la contratación «como le viene en gana». Algo que pretende llevar a cabo «en beneficio de sus cuatro amiguetes y dándole la espalda a los remolacheros que han mantenido vivo el cultivo», explicó por su parte el responsable de COAG en Sevilla, Y todo ello «saltándose a la torera los criterios establecidos en el Acuerdo Marco Interprofesional (AMI), rompiendo el consenso y el esfuerzo conjunto y poniendo en serio peligro al sector».

Según el citado acuerdo, este reparto debe realizarse dando prioridad a los agricultores que han cumplido con creces sus contratos; también a todos aquellos que, independientemente de las circunstancias de la campaña concluida, han apostado por el cultivo, comprometiéndose durante cinco años en el régimen de producción integrada.

Por su parte, Miguel Pérez aseguró que «vamos a plantar cara a la industria ante algo que recuerda a otros tiempos».

Unas 100.000 toneladas

Son más de 100.000 las toneladas, especificaron además, que la industria no pagará a los agricultores, ya que es la cantidad afectada por dicho reparto «de manera unilateral».

COAG Andalucía recuerda que son los términos establecidos en la mesa interprofesional los que deben aplicarse para el reparto de la cuota. Sin embargo, lo que British Sugar planteó en la pasada reunión de la Mesa de la Zona Sur es que dicho reparto se realice «de forma arbitraria y según sus propios criterios».

Ante este panorama, y si la industria no rectifica en la nueva reunión de la mesa zonal que tendrá lugar hoy, COAG emprenderá movilizaciones a las puertas de la fábrica, en las que espera contar con el resto de miembros de la Interprofesional. Tampoco descarta paralizar la actividad.

Papel de la Junta

Además, solicitará la intervención de la Consejería de Agricultura para garantizar que el reparto de la cuota y de las posibles ampliaciones que pueda haber en el futuro se hagan atendiendo a los criterios sociales y de reparto justo. «No vamos a permitir que British Sugar se llene los bolsillos a costa de los andaluces», concluyó José Antonio García.

Desde que se aprobara la nueva OCM del Azúcar, en el año 2006, el sector ha vivido un fuerte proceso de reestructuración, que ha provocado una considerable pérdida de superficie y de rentabilidad, por la reducción del precio de la remolacha.