Alonso quiere retirarse en Ferrari

Los analistas de las agencias internacionales han descrito la contratación de Alonso por Ferrari y la salida de Raikkonen como la elección del carisma frente al pragmatismo. Curiosa interpretación sobre alguien que, como el asturiano, no tiene en España, precisamente, el cartel de personaje dicharachero y jovial por naturaleza. En el exterior, sin embargo, sí le ven como un atleta con gancho para el deporte. Esto se plasmó este jueves en el circuito japonés de Suzuka. Una marea de periodistas para escuchar las primeras impresiones de Alonso ya como nuevo piloto de Ferrari.

Alonso habló de retirada, de caducidad en la Fórmula 1. Le preguntaron y respondió: «Creo que Ferrari será mi último equipo. Marcharse de ahí para cambiar sería un paso atrás. Ferrari es más que un equipo, el único que está por encima de los pilotos. Después de estar aquí, no se puede estar en un sitio mejor».

Al asturiano le encanta juguetear con los enviados especiales, con la voluntad de mando sobre sus vidas. «Estaré cinco o seis años más aquí. O tal vez diez», bromeaba el año pasado. Sellado su compromiso con Ferrari, el piloto debe ceñirse ahora a unos límites. Tres años de contrato y la posibilidad de ampliación según variables. «Son tres años y los apellidos», sintetizaba ayer desde Japón su manager Luis García Abad.

«El peligro es ganar»

Es decir, Alonso podría retirarse con 31 años (dentro de tres) o ampliar su estancia dependiendo de los apellidos y el laberíntico mundo de las cláusulas. «La retirada es algo en lo que pienso, pero no es fácil imaginar. El peligro es ganar y que todo vaya bien. Por eso tendría la tentación de seguir compitiendo. Es por esta razón que me digo que en unos años, si tengo la posibilidad de ganar un título, será el mejor momento de dejar la F-1».

«Haber fichado para correr con ellos es una culminación. He ganado carreras y campeonatos en otros equipos, he hecho poles y he tenido grandes sensaciones en mis nueve años en la F-1. Y ahora he dado un paso perfecto para que mi carrera en la F-1 sea completa».

Alonso habló de Felipe Massa, de una rivalidad obligatoria, según la cual el compañero de equipo siempre es el primer adversario: «Ganar a Felipe no será fácil. Los dos aspiramos a ser campeones y defenderemos nuestras opciones en la pista. Pero no habrá diferencias entre nosotros. Él estará al principio más adaptado que yo al coche y al equipo y eso le dará confianza. Nuestra relación es estupenda. Pero algunos van a hablar de discusiones entre nosotros, eso es inevitable. No las habrá. Los dos somos latinos, hablamos italiano y somos parecidos».

El primer acto del español con Ferrari podría darse el 15 de noviembre en Valencia, en el marco de la fiesta final de temporada de la marca. Alonso dijo que, si Renault no le da permiso, «será difícil». «Pensaré en Ferrari a partir de Abu Dhabi (la última carrera de 2009)». Alonso quiere marcharse de Renault dejando amigos: «Durante casi toda mi vida en la F-1, he caminado con Renault de la mano. Quiero mantener el contacto con todos los buenos amigos que he hecho durante estos años. Es un grupo de gente que llevaré siempre en el corazón».

«Soy la misma persona hoy que el chico que era en 2001 cuando llegué a Australia. No ha cambiado nada. Lo que ha cambiado son cosas a mi alrededor. Cuando llegué a Minardi nadie me conocía. Hoy me respetan y me admiran y eso ha cambiado. Pero Fernando es el mismo. Soy una persona normal».