«Es la primera vez que nos reunimos y por casualidad»

No es un chiste, no, pero podría ser el título de una de las pocas barbacoas multigeneracional e internacional que se pudo ver en la zona acotada de las barbacoas. Hanke, de Hamburgo, venía con su esposa Rosa. Carmen, una niña de Cáceres, con sus amigas de veraneo, y Luisa con su comadre Carmen. Identificar a todos los miembros (venidos también del País Vasco, Málaga, Sevilla y Asturias) de esta peculiar, aunque tradicional barbacoa (Bernardo preparaba unas jugosas carnes mientras los niños jugaban y las abuelas charlaban) resultaba imposible entre tanto barullo. «Nos hemos reunido por primera vez aquí y por casualidad», decía Bernardo. «Daremos paso a la juventud a la 1», comentaba Luisa.