Fallece en Torrecera un operario tras caer de una escalera y golpearse con una viga en la nuca

La pedanía jerezana de Torrecera no ha podido tener un inicio de Feria de San Juan más trágico. Un operario de 25 años de edad falleció el miércoles por la noche al caer de una escalera y golpearse con una viga en la nuca.

Sucedió sobre las 20.50 horas, poco antes, por tanto, del alumbrado del recinto ferial que debía dar el pistoletazo de salida oficial a las fiestas. El joven, que trabajaba para la empresa a la que el Ayuntamiento contrató todo el servicio de iluminación con motivo de esta cita, se encontraba en la caseta municipal manipulando un cable del techo. Estaba subido a una escalera y, por motivos que se desconocen y que están siendo investigados, perdió el equilibrio y cayó, con tan mala suerte que se golpeó la nuca con una viga -aunque otras fuentes señalan que pudo ser con un tubo que estaba en el suelo-. Hasta el lugar se desplazaron efectivos de Policía Local, Guardia Civil y servicios sanitarios, que no pudieron más que certificar la muerte de este trabajador de 25 años.

El consejero de Empleo, Antonio Fernández, lamentó el fallecimiento del trabajador y anunció que investigará el accidente registrado, tras lo que destacó que los índices de siniestralidad «han bajado de forma importante».

Fernández aseguró desconocer si tiene la certificación de accidente laboral por el contexto de una feria y apuntó que «se tendrá que investigar». «El fallecimiento de una persona entristece», apuntó el consejero, quien agregó que, «sin relativizar ningún dato este año, los índices de incidencia, que hace referencia al numero de accidentes si se compara con el número de ocupados, han bajado de forma importante».

Agentes de la Policía Judicial ya estuvieron en la mañana de ayer en la misma caseta municipal investigando el suceso, con el objeto de determinar las causas y si se podujo algún tipo de negligencia.

El alcalde pedáneo de Torrecera, Manuel Bertolet, señalaba ayer a este medio que el suceso «ha conmocionado a todo el pueblo», un núcleo rural que cuenta con unos 1.300 habitantes y que nunca antes había vivido un episodio de este tipo.

Tras el suceso, Bertolet decidió suspender los actos oficiales previstos para la noche del miércoles con motivo de la Feria de San Juan. No se llevaron a cabo, por tanto, ni el alumbrado ni la coronación de las damas. Ayer, sin embargo, sí se retomaron las celebraciones después de que el Ayuntamiento «reestructurase ligeramente» el programa.

El cuerpo del fallecido fue trasladado al tanatorio de Chiclana, donde se reunieron a lo largo del día de ayer numerosos familiares y amigos, además del propio alcalde de Torrecera, que se lamentaba de «la mala suerte que tuvo el chaval». Al cierre de esta edición no se había fijado aún la fecha del funeral, aunque el mismo podría celebrarse en la jornada de hoy.